Como él mismo ha explicado tras el partido, ha ido de menos a más. Kike Márquez ha ido creciendo conforme se disputaba el encuentro ante el Almería B y de su bota salió el gol que abría que daba la tranquilidad y la asistencia a Jona en el tercero. Para el sanluqueño “Mi comienzo ha sido un poco espeso. Enfrente había un buen equipo y poco a poco he ido encontrando espacios y ganando en confianza. Aquí cada uno se juega la vida cada domingo. El míster está haciendo que todos estemos al cien por cien y eso hace que el equipo esté a un nivel muy alto. Pudimos tener más el balón pero estamos trabajando para ello y con tiempo eso llegará a buen puerto".

Miguel Rivera, entrenador del filial rojiblanco, dijo que el gol de Kike Márquez le recordó al que le marcó Isco al Almería. El jugador cadista sonreía cuando se le recordaba esas palabras. “Eso es porque me tiene mucho cariño por la amistad que me une con él”.

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