Otro de los jugadores que ayer hacía tour por medios de comunicación fue Álex Fernández, que acudió a la tertulia de Deportes COPE Cádiz. El centrocampista madrileño reconoce sin tapujos que “estoy en el mejor momento de mi carrera. Disfrutando mucho en un equipo como el Cádiz, saliendo las cosas bien en lo personal y sobre todo con el equipo. Siete victorias en lo personal, parece mentira, y todos muy metidos. Muy metidos”. Su vida ha cambiado también en tierras gaditanas pues recientemente ha estrenado paternidad. “Mi hijo nació en Madrid por comodidad nuestra, pero nos hubiera dado igual que naciera en Cádiz. Eso sí, se criará aquí. Es un lujo vivir en Cádiz. La gente me trata con cariño, con respeto, me siento muy valorado más allá de lo deportivo. Mi mujer está muy contenta aquí y no se puede pedir más”.
El equipo va como un tiro pero es también el primero en mantener los pies en el suelo para explicar lo complicado que ha sido lograr cada una de las siete victorias consecutivas que llevan. “Vamos cada partido pensando que podemos seguir, pero cuando ganamos cada partido también pensamos que está más cerca la derrota porque es tan complicado… Hace dos meses nos costaba ganar un partido muchísimo. Por eso valoramos ahora mucho más cada victoria. Que siga la racha”.
Prorrogó su contrato con el Cádiz por tres años más y está contento por esa decisión por varios motivos. “Me he quedado en un proyecto ganador y ambicioso. Si me he quedado en el Cádiz es porque quiero ir a Primera División. No quiero que seamos un club conformista y creo que se están haciendo las cosas bien. Con Juan Carlos estaba hablando en ese momento, pero con mucha calma. Cuando llegó Óscar hubo ese cambio repentino, Óscar me transmitió cosas muy positivas y me transmitió mucho. Las negociaciones fueron cortas porque era lo que todos queríamos hace tiempo”.
Todos esos puntos a favor hicieron incluso rechazar a clubes de categoría superior. “Nunca imaginé que iba a decirle que no a una oferta de Primera porque tenía muchas ganas de volver ahí, después del paso que tuve por el Espanyol, pero cuando han venido este verano ofertas importantes y decirle tanto yo como el club que no para mí ha sido satisfactorio porque eso significa que estoy bien aquí”.
Su ambición está clara y quiere lograr el ascenso vestido de amarillo. “Si no me viese con el Cádiz en Primera no hubiese renovado. No soy conformista en ninguna faceta de mi vida”. “Es complicado porque el año pasado también tuvimos esta racha y al final tuvimos un bajón. Pero las cosas se están haciendo bien y eso ayuda a todo el mundo. Es cogernos todos de la mano, remar en la misma dirección. El techo nos lo pondremos nosotros mismo”.