
También desveló al programa deportivo que dirige Rubén López algunos aspectos de los primeros días de su llegada y la impresión que tuvieron cuando vieron la situación económica del club. “Cuando el grupo compró el Cádiz no miró las cuentas porque tenían ganas de invertir en un club importante como éste. Sabíamos más o menos las deudas porque Antonio Muñoz nos dijo lo que había y que él nos garantizaba que él cubría cualquier desajuste del año pasado. Pero cuando hablamos con los administradores la cosa parecía otra. Ellos estaban preocupados porque no sabían si el Ayuntamiento iba a pagar lo que debía. El 15 o 16 de Julio, cuando se iba a hacer la presentación oficial, estuve a punto de dar marcha atrás porque no sabíamos cuando íbamos a poder empezar a fichar a jugadores. Teníamos a algunos apalabrados a los que les tuvimos que decirle que no esperaran más porque no sabíamos lo que iba a pasar”.