Hace unos días se conocía la decisión que había tomado el Cádiz CF de no recurrir ante el Tribunal Constitucional por el caso de la reconocida alineación de Kiko Femenía con el Hércules CF en aquel partido del año 2008.

Muchos fueron los recursos presentados por los servicios jurídicos del club cadista, que en aquel entonces estaban capitaneados por Martín José García Sánchez y su hijo, Martín José García Marichal, dos de las pocas voces autorizadas para, objetivamente y con datos, defender esa causa cadista con el consiguiente frenazo en seco que se ha producido en ella.

Precisamente es Martín José García Marichal el que, atendiendo a PORTAL CADISTA, no dejaba de mostrar su asombro por la decisión que ha tomado el club de no continuar el proceso "se ha parado el tema de una forma un poco sorprendente. No llego a comprender las motivaciones que han tenido para parar el tema de esta forma, después de tantos años luchando y después de haberse conseguido lo más complicado, que es el reconocimiento judicial de que ha habido alineación indebida”.

Hablando desde la prudencia, el que fuera anteriormente secretario del Cádiz CF comentó que "no puede ser que la Audiencia Nacional falle a favor tuya y te prive de la consecuencia jurídica de fallar a favor. La alineación indebida no es un supuesto en el que se necesite una connotación de culpa o intencionalidad. Producir una alineación indebida tiene una consecuencia automática y lo que no puede ser es que te lo reconozcan y te priven de ello alegando de que no ha existido culpa. Y es que si no se conoce una norma, esa ignorancia se considera culpa". Ante la decisión de la Audiencia Nacional, criticó el abogado gaditano que "o se cambias la norma y te cargas el sistema o es que aquí falla algo”.

Martín José García Marichal, ya desde fuera, destacó que "a mi no me corresponde decidir ese tipo de cuestiones. Ha sido el Consejo de Administración el que habrá ponderado las razones que haya considerado oportunas", pero tiene claro que "nos vamos a quedar con la incertidumbre de conocer cuál era ese pronunciamiento final, tras haber existido el hecho causante". 

Pero en lo que no quiere pensar es en conspiraciones ni en manos negras "yo siempre he creído en la limpieza de la competición. Y no puedo tolerar que se insinúe que si cedemos al chantaje se nos va a beneficiar. Nosotros defendimos los intereses del club hasta las últimas consecuencias y al final se ha demostrado que teníamos razón”.

Y concluyó recalcando que "a mí me ha sorprendido esa decisión. Sé que no es un tema sencillo, pero con los intereses que estaban en juego y habiéndose producido ese pronunciamiento favorable, lo más lógico hubiera sido llegar al final. Es algo que yo veo desde fuera y quizá las personas que tienen que tomar la decisión tenían otra información y han decidido tomar esa decisión que han tomado, que la tengo que respetar”.