Manuel Vizcaíno ha querido aclarar el por qué ha tomado la decisión de cesar de sus funciones a Juan Carlos Cordero.

El presidente del club cadista destacó que “durante los convulsos años desde que llegamos, convulsos en lo institucional, que sin embargo creo que con la buena actitud de todos conseguimos que nunca afectara al equipo. Ante el peligro que tendía que podría sufrir en este momento del proyecto y afectara al primer equipo, he tomado la dolorosa decisión de prescindir de Juan Carlos Cordero y pienso que esta es la mejor decisión en este momento”, declaró en los micrófonos de Canal Sur Radio.

Vizcaíno vio peligro en que “la situación institucional, el doble discurso, afectara al club”, añadiendo que “veía peligro de que llegara el conflicto al vestuario y tenía que evitarlo”.

Sin dar mayores detalles, el dirigente dejó muy claro que “la decisión no se ha tomado por motivos deportivos” y que “Cordero es víctima de una guerra”. E insistió en que “nunca voy a explicar el por qué tomo  decisiones que no se entienden, pero si la tomo es por el bien de la entidad”.

Y entre esas razones está la operación de Álvaro García. “Entiendo que como se ha llevado lo de Álvaro García ha influido en el resultado final del mercado de verano y puede ser uno de los elementos que hayan influido en la destitución de Cordero”.

Meses atrás Vizcaíno ofreció la renovación a Cordero. “Es cierto que le propuse un contrato parecido al de Pina, pero con unos matices importantísimos, diferentes a los que hacía que no se validara el mismo, y que incluía los bonus”.