Vendaval del filial cadista que se aprovechó de los regalos del rival.

Foto: portalcadista.com

El Cádiz B comenzó el 2012 y la segunda vuelta de la liga de forma inmejorable, endosándole una “manita” a uno de los gallitos de la categoría, un Algeciras que se plantó en Puerto Real con la cabeza puesta en las fiestas navideñas. Sólo así se puede explicar la penosa imagen ofrecida por el equipo campogibraltareño, una imagen impropia de un club casi centenario que, a priori, tiene las máximas aspiraciones en esta liga. No obstante, el fracaso algecirista es ante todo la consecuencia del excepcional partido ofrecido por los chavales del B, que dieron un recital de fútbol y compromiso demostrando desde el primer minuto que el tropiezo pre-navideño ante el Marinaleda estaba más que olvidado.

Juanma Carrillo sorprendía a todos plantando la defensa casi en la línea medular del campo y ordenando una fortísima presión sobre el rival en su propia parcela, lo que, aderezado con la tremenda empanada que traían los futbolistas algecireños, dio pie a una sucesión de robos de balón por parte de los cadistas en tres cuartos de campo. Con este escenario pronto llegaría la primera ocasión para el Cádiz B en un uno contra uno de Wilson Cuero que no pudo superar al meta Nandi. La respuesta de los campogibraltareños vendría poco después por mediación de Alvi, que se aprovechó de la posición adelantada de la zaga local para plantarse sólo ante la portería pero Cobaleda tiró de agilidad para quedarse el balón en el intento de dribling. Un minuto después la tuvo Blanco pero nuevamente se anticiparía Nandi. En la siguiente jugada fue el turno del visitante Iván pero su remate colocado se marchó besando el palo derecho de la meta cadista. El partido era un toma y daca y el gol se veía venir pero no estaba claro en qué portería. No hubo que esperar mucho tiempo para encontrar la respuesta. Corría el minuto 20 cuando una falta lateral lanzada por Blanco es rematada a placer por Floren en el área pequeña ante la mirada atónita de toda la zaga algecirista. El 1-0 espoleó a los amarillos que encontrarían otra vez el gol apenas un minuto después gracias a otro regalo, en esta ocasión del cancerbero Nandi, que puso el balón en bandeja a Alberto para que anotara el segundo tanto del partido. Con dos días de retraso, los Reyes Magos habían llegado a El Rosal.
Ante tanta generosidad, el equipo algecireño se convirtió en un monigote en manos de los jóvenes jugadores cadistas. Pasada la media hora y en plena vorágine de ocasiones llegaría el tercer tanto. Cuero se aprovecha de la debilidad de los centrales algeciristas para plantarse ante Nandi que sólo pudo evitar el gol derribando al delantero colombiano. Penalty y tarjeta amarilla, que bien pudo haber sido roja. La pena máxima fue transformada por Blanco para llevar el sorprendente 3-0 al marcador. Como suele pasar en estos casos, la frustración de los jugadores algeciristas se tradujo en una suerte de patadas sin ton ni son que el árbitro sancionó con varias tarjetas amarillas y la expulsión del zaguero Santander (minuto 38), lo que enardeció los ánimos de los numerosos seguidores algeciristas desplazados a Puerto Real, que, a falta de crítica a sus propios jugadores, la tomaron con el colegiado.

Al borde del descanso el partido ya era una caricatura, con un Algeciras desquiciado y un Cádiz B ambicioso y con ganas de más goles. Y por si quedaban dudas sobre el resultado, llegaría el cuarto gol cadista, fruto de un potente chut de Alberto desde la derecha que se coló en la portería ante la mirada atónita de Nandi.

Muchos algeciristas aprovecharon el intermedio para iniciar el viaje de retorno en sus vehículos particulares. Otros, los que vinieron en autobús, se marcharon del campo Macarty, sede del partido, y se metieron en problemas con la Policía Nacional en la zona de aparcamientos de la Ciudad Deportiva. Por supuesto, también los hubo que se mantuvieron en la grada aguantando estoicamente el chaparrón.

Como era de prever, la segunda parte fue un trámite, un entrenamiento con público, del que sólo merece destacar el quinto gol cadista, obra de un Wilson Cuero que cada partido que juega crece más como delantero. Seguro que si sigue con esta progresión estará llamado a cotas mayores en un futuro muy próximo. La absurda expulsión del central Akrong fue el pequeño borrón a un partido para enmarcar en el que los cadistas dieron una lección de profesionalidad y ambición ante un Algeciras que seguro estará arriba de la clasificación a final de liga pero que en El Rosal se comportó como un equipo muy pequeño.

ALINEACIONES:

CÁDIZ CF “B”: 1. Álex Cobaleda (2), 2. Gabi (2), 3. Tiri (3), 4. Florencio (3), 5. Akrong (2), 6. Polo (2), 7. Alberto (3), 8. Mohamed (3), 9. Wilson Cuero (3), 10. Blanco (3) y 11. Juanma (2).
Cambios: Riki (2) por Juanma (min.51); Lora (2) por Alberto (min. 62) y Gordo por Wilson Cuero (min. 67).

ALGECIRAS C.F.: Nandi (0); Juanjo (0), Benítez (0), Marcelino (0), David Santander (0); Javi Chico (1), Mario (0), Iván (0), Nacho (0); Alvi (1), Nacho (0).
Cambios: George (0) por Iván; Dani Venegas (0) por Francis y Willy (0) por Nacho.

ÁRBITRO: Sr. Fernández Delgado (Huelva). Expulsó a David Santander, por parte algecirista, y al cadista Akrong.

GOLES:
1-0 Floren (min. 20).
2-0 Alberto (min. 21).
3-0 Blanco (min. 33).
4-0 Alberto (min. 48 1ª parte).
5-0 Wilson Cuero (min. 64).

INCIDENCIAS: Unos 250 espectadores, muchos venidos desde Algeciras. Mañana fría y con fuerte viento de levante.