Los estadios españoles están siendo objetivo de severas medidas de restricciones con respecto a la afluencia de fútbol a los partidos. Ayer se pudo ver en el Trofeo Carranza con tan solo un 25% permitido y la imagen de aficionados muy separados en las distintas gradas.
Sin embargo no fue igual en Mestalla, donde el Valencia disputaba el Trofeo Naranja frente al Milan y donde se permitió la entrada a 3.000 aficionados. La imagen que se convirtió en viral fue la ridícula disposición de estos ya que el club ché los colocó en un solo sector de la grada del estadio y sin distancia de seguridad.