Hospitalet es una nueva ciudad a la que el cadista debe de subrayar en negro, otra catástrofe en el devenir de nuestras aspiraciones nos han vuelto a tumbar en la cuneta de la forma más esperpéntica y cruel posible. Una ciudad más a la larga lista de desgracias amarillas: Alicante, Huesca, Getafe, Amurrio, Miranda del Duero, Lugo, Tarragona… que les voy a contar que ya no sepan.
Lo de Hospitalet fue la consecución y el fiel reflejo de una temporada caótica en lo deportivo y en lo administrativo, el giro de timón de última hora de ‘Locos por el Balón’ no llegó con la suficiente energía o tiempo para virar la nave al rumbo correcto, el daño ya era mayúsculo desde hace meses y el agua hace tiempo ya que se estaba colando en las bodegas de la institución.
Es indudable que no podemos excusar a la mala suerte no saber defender un 0-1 a falta de 15 minutos, tenemos que ser autocríticos y pensar que las cosas no se hicieron bien desde Agosto, que la llegada de Sinergy al club supuso un auténtico descalabro deportivo y económico. El cadismo aún paga las recisiones de contrato de gente que pisaron y escupieron el orgullo de nuestro escudo sin escrúpulos y ahora sonríen en divisiones mayores mientras nosotros vamos por el quinto periplo en las catacumbas de segunda B, de gente que JAMÁS defendió al Cádiz CF ni en el campo ni en los despachos.
Finalmente nos vemos de nuevo los de siempre, luchando por remar a contracorriente en la ineptitud de los que corren, la ineptitud de los que dirigen. Hemos visto infinidad de ocasiones como muchos se han ido y nosotros hemos sido los únicos que hemos sobrevivido.
Hemos caído, por enésima vez, pero nuestra grandeza está en levantarnos, en ver como la gente ya está deseando volver a sacarse el carné de socio. Los nuevos propietarios del club tienen desde hoy para hacer las cosas bien, para intentar limpiar toda la mierda que dejaron atrás los anteriores e ilusionar de nuevo al cadismo. Sé que bastará con poco, que allí estaremos de nuevo.
No pediré la cabeza de nadie, no pediré que me traigan a fulanito o que echen a menganito, solo pediré, que los que dirigen se acuerden de los que tuvimos antes, aquellos que nos dieron tanta gloria en el pasado, gente comprometida, con hambre…piensen en los años de Irigoyen, piensen en el once de Chapín, piensen en aquellos hombres, busquen ése carácter… porque llevarán otros nombres en las camisetas, llevarán otros números, pero como reza nuestro himno centenario no olviden que el nombre de Cádiz es mucho más grande que el nombre de atrás.
El Cádiz somos nosotros. Volveremos.
Yasser Tirado
Aficionado al Cádiz CF y CEO de memoriasdeunbar.com