Carta abierta a la plantilla del Cádiz CF
Por fin llegó el playoff, se acabó el trámite de la temporada. Si, tramite. Porque todo y cada uno de vosotros, cuando firmo por este club, lo hizo consciente del condicionante de que el único objetivo válido era ascender, y todo ascenso pasa por un playoff.
No ha sido una temporada fácil, ni para vosotros, ni mucho menos para nosotros. Os recibimos como a un hijo, os vitoreamos como a gladiadores, y acabamos avergonzados y crispados con vosotros. Os lo merecéis, lo sabéis. La temporada ha sido horrible y llegamos con una mísera cuarta posición. Pero no pasa nada, si hay que ascender en 3 eliminatorias y no en una no pasa nada.
Ahora tenéis la oportunidad de cambiarlo todo, porque para bien o para mal los playoff es un nuevo comienzo. Nosotros sabemos perdonar, y olvidar, y acudiremos a Carranza dispuestos a fundirnos con vosotros, a animaros hasta la extenuación, a creer en el ascenso. Pero no podemos hacerlo sin vosotros.
Para algunos de vosotros, Cádiz y el Cádiz no es sino una estación mas de vuestra trayectoria, para algunos la última. Algunos sois recién llegados, por lo que no vamos a apelar al cadismo ni a los besos en los escudos. Pero si al honor. Tenéis la oportunidad con que todo atleta sueña, la oportunidad de grabar vuestro nombre en la historia y de haceros eternos. Como lo son mágico, Kiko y compañía. Oli y Armando. Enrique y Pavoni. Palacios y Abraham Paz. Como el sello de los Ramon blanco, Victor Esparrago o Javi Gracia.
El destino ha querido que tengáis en vuestras manos, o botas, no solo un ascenso, si no la llave de la supervivencia de un club centenario. Vosotros mejor que nadie sabéis que no todo lo que reluce es oro, y que esta club marcha a un futuro incierto por los especuladores y carroñeros ávidos de hacer su negocio a nuestra costa. Quizás también os ha decepcionado que la “simpática” afición del alcohol y el buen humor tenga ese lado mas crítico y duro que habéis vivido en los últimos tiempos. Pero ahora toca olvidar todo eso. Ahora nos toca unirnos y luchar por este escudo. Luchar por vuestra gloria. Luchar porque algún dia podréis sentiros orgullosos ante vuestros hijos por formar parte de ese ascenso histórico. Luchad por lo que llevéis dentro, pero luchad. Va a merecer la pena, os lo prometo. No nos falléis, juntos seremos eternos.
Manuel López de Silva
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