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Sin portero |
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21.03.2011 |
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Sin un guardameta de garantías es imposible subir a Segunda División A. Así de claro y así de triste para el Cádiz CF, que no posee en su plantilla a un portero capaz de transmitir a sus defensores la seguridad necesaria en los momentos puntuales de un partido. Recuerdo que durante el pasado mercado de invierno el compañero y amigo Jose Grima me preguntó en su Comisión Deportiva (Onda Deportiva Cádiz) qué puesto del equipo amarillo reforzaría. Mi respuesta fue clara: la portería. La llegada de un delantero parecía importante para dar refresco a Sergio Pachón, sí, pero delantero ya teníamos, lo que hacía falta como el comer era un portero.
A mi juicio, ya desde el inicio de la temporada, ni Dani Miguélez ni Álvaro Campos poseen el nivel necesario para ocupar un puesto de semejante envergadura. Al primero le pierde su mala cabeza, su aire de superioridad cuando se encuentra entre los tres palos. Pocas veces se ha visto a alguien creerse tanto habiendo hecho tan poco en el mundo del fútbol. Tiene condiciones para ser un buen portero, pero le falta muchísimo por aprender y eso al Cádiz CF no le sirve. A este equipo no se viene a aprender, sino que se debe llegar con todo aprendido ya, algo que también sirve para Álvaro Campos.
A principios de Liga los máximos aspirantes al ascenso eran el Cádiz CF y el Real Murcia, por lo que si el primero confía su portería a un guardameta que abandona sin problemas el equipo filial del segundo, está claro que algo falla en la confección de la plantilla. Por supuesto, la culpa no es de ninguno de los dos porteros, puesto que yo mismo, que no tengo ni la menor idea de cómo jugar en esa demarcación (ni en ninguna), aceptaría un contrato si el Cádiz CF me lo propusiera. El problema está en quien le ofrece ese contrato a dos jugadores que, en mi opinión, no dan la talla para que el proyecto del ascenso llegue a buen puerto. Creo que la dirección deportiva se ha equivocado en estos casos, además de en otros evidentes como David González, Ian Daly, Hugo García... Eso sí, a Dani lo renovó directamente el máximo accionista, el mismo del que depende un presupuesto tan irrisorio que al encargado de confeccionar la plantilla apenas le da para fichar retales de otros equipos.
Álvaro Geneiro
Información Bahía