Aún no me quito de la cabeza las lágrimas de muchos aficionados y de muchos jugadores tras el empate ante la Real Sociedad. Todo lo personalizo en un nombre: Fabián Larry Estoyanoff. El poder de superación, las ganas y las agallas tienen en él su nombre propio. Ojalá algunos supieran aprender del uruguayo. Ojalá también en el Cádiz se fuera capaz de poner las cartas sobre la mesa y decir que hay un jugador que lleva más de un mes apartado del equipo. Es cierto, quizás no sea aún el momento de abrir la caja de Pandora, ahora todos debemos estar centrados en la consecución de la permanencia.

No se desanimen, ¿eh?. Aquí si se 'muere', se 'muere' matando y demostrando al mundo entero que Cádiz es de Primera. La clasificación dirá una cosa, pero todos somos conscientes que es injusto moralmente. Quizás haya que ir preparando el cuerpo, quizás tengamos que rezar más de la cuenta y mirar al cielo esperando al milagro. Mientras que aún sea posible matemáticamente hay que agarrarse a un clavo ardiendo.

P.D. El que no sea optimista que escuche en la tertulia de Onda Cero a Manolo Granado. Si su calculadora continúa funcionando, yo me aferro a ella.