Las calles del centro de la localidad cordobesa se tiñó de amarillo.

Foto: portalcadista.com

Alrededor de trescientos fueron los aficionados cadistas que se desplazaron desde Cádiz hasta Lucena para ver el partido de la vergüenza y del 3-0 final en el estadio Ciudad de Lucena.

Poco más de un centenar de ellos viajaron en los autobuses fletados por la Federación de Peñas Cadistas y otros tantos lo hicieron en coches particulares.

A pesar del resultado, de las sensaciones y de las dudas, los verdaderos buenos momentos fueron los que se vivieron en la previa del partido, tanto cuando se paró a desayunar como cuando se llegó a Lucena.

Ya en la localidad cordobesa adquirieron las entradas para el partido y luego algunos optaron por dar un paseo por el centro de la ciudad, con parada gastronómica incluída.

Los más fiesteros no dudaron en emular, con mucho humor, una procesión gaditana por las calles de Lucena.

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