Los líderes de cada uno de los cuatro grupos de Segunda División B olfatean las consecución definitiva del liderato y quieren certificarlo cuanto antes para pensar ya en esa fase de ascenso en la que se jugarán a doble partido la primera de las oportunidades para estar en la categoría de plata.

El próximo fin de semana tienen la oportunidad de hacerlo algunos de ellos y la victoria en sus partidos es la vía para conseguirlo.

En el Grupo I al Real Madrid Castilla, que tiene actualmente 12 puntos de ventaja con respecto a Lugo y Albacete, le basta como hacer lo mismo que sus perseguidores o incluso perder y que gallegos y manchegos no ganaran para ser matemáticamente primero de la tabla. Se enfrenta al Real Oviedo (5º) en el Tartiere, ante un equipo ovetense que se juega entrar entre los cuatro primeros. Por su parte el Lugo recibe en casa al Rayo Vallecano B (8º) y el Albacete visita al Real Sporting B (10º).

En el Grupo II el CD Mirandés parte con 10 puntos de diferencia. Para firmar el liderato le bastaría ganar y olvidarse de lo que hiciera su perseguidor la SD Ponferradina. Si no lo lograra, igualar lo que hicieran los leoneses sería suficiente. El Mirandés visita a la Real Sociedad B (16º) y la SD Ponferradina hará lo propio con el Real Unión (14º).

En el Grupo III el At. Baleares tiene 5 puntos de diferencia con el Orihuela. No podrá certificarlo esta jornada y tendrá que esperar al menos una más. Los mallorquines reciben al Denia (13º) y el Orihuela a la UE Llagostera (5º).

En el Grupo IV el Cádiz arranca como líder la jornada con tres puntos de ventaja sobre el Lucena y cuatro sobre la Balona. Gracias a que tiene ganado los tres puntos de la última jornada del retirado Poli Ejido, podría ser líder matemático este fin de semana. Para que ello ocurra debe ganar su partido ante el Lorca Atlético (15º), que el Lucena pierda en casa ante el Betis B (5º) y la Balona no gane en Cáceres ante el Cacereño (7º).