Varias cosas son las que tiene que arreglar el conjunto maño en su visita a Cádiz si quiere sacar un resultado positivo este próximo lunes. Los de Víctor Fernández están teniendo serios problemas a la hora de hacer gol fuera de su feudo y la prueba está en el que último lo logró hace dos meses.
Fue en su partido en Lugo cuando los aragoneses marcaron su último tanto. En dicho encuentro vencían a los gallegos por 1-2, pero desde entonces ese casillero se ha mantenido a cero en partido como el de Pamplona (1-0), Granada (1-0) y Mallorca (3-0).
Este lunes en la Tacita de Plata intentarán, a través de la tranquilidad que les ha dado el último triunfo ante el Nástic, encontrar esa vía para ver portería contraria. Lo buscarán ante un Cádiz que tampoco se está caracterizando por ser un equipo demasiado compacto atrás. No en vano los de Cervera no han mantenido a cero su puerta en los tres últimos compromisos.