El entrenador del Albacete comparó la situación de su equipo con la del Cádiz.

Foto: portalcadista.com

Julián Rubio vuelve al Ramón de Carranza, pero entrenando al Albacete, dejando atrás los tres partidos que entrenó al conjunto cadista y por los que no pudo eludir el descenso.

El entrenador manchego considera “exagerado decir que el partido contra el Cádiz es una final” ya que son dieciséis partidos los que quedan y “si esto fuera así tendríamos dieciséis finales de aquí en adelante", añadía.

Sobre su vuelta a Cádiz admitía que “siempre es especial volver a un sitio donde has estado”, un equipo del que se acuerda por “ser mi primer descenso, con ese penalti fatídico que falló Abraham Paz en el último segundo. La realidad es que no merecimos perder ese partido ni los de anteriores”, recordó.

Comparó la situación del Albacete y la del Cádiz “ambos equipos estamos en la misma situación. El fútbol no nos está dando lo que nos merecemos”.

También habló del equipo que sacará, que podría contar con la presencia de Callejón, al que le da un pequeño tirón de oreja “Callejón es un futbolista con unas cualidades excepcionales, pero hay que exigirle más. Hay jugadores que les elogias y ya creen que han hecho todo bien y otros que siempre son ambiciosos. Porque Callejón tirara una vez a puerta, lanzara el córner del gol o realizara alguna jugada no tenemos que premiarle con tantos elogios. Todos debemos exigirle más porque sabemos que puede hacerlo todavía mejor”, sentenció.