No conocían los celestes la derrota en la presente temporada en Balaídos, pero un gol de De Quintana en el minuto 61 y otro de Manolo Pérez al trasformar un penalti en el tiempo de descuento, pusieron fin a tanta buena estadísticas y, de paso, asentó a los gaditanos en los puestos de ascenso. De esta forma, el Cádiz se convierte en el único equipo hasta el momento que ha ganado los dos enfrentamientos ante los de Vigo, pues ya en la primera vuelta salieron triunfadores con el mismo resultado en el Ramón de Carranza.

Oubiña, k.o. en el minuto 5
Los celestes sumaron su cuarta derrota de la temporada en un partido disputado, hasta el momento del primer gol, de igual a igual por ambos conjuntos pero sin demasiadas ocasiones claras de gol. Pudo contar de inicio Fernando Vázquez con el mismo once de la jornada pasada pese a las dudas sobre el estado físico de algunos jugadores, en especial de Borja Oubiña, que salió al césped pero sólo para jugar unos instantes, pues cayó lesionado en un mal apoyo de la pierna derecha en el minuto 5. Su puesto fue ocupado por Nagore, apostando el técnico celeste por dar continuidad a un sistema, el 4-1-4-1 que tan gratificantes resultados le ha venido dando en los últimos tiempos.

Con Jandro y Canobbio mucho menos lúcidos que en pasadas jornadas, el Celta se ahogó en un juego sin garra ni presión que tuvo su mejor jugada en la primera parte en un centro desde la banda izquierda de Gustavo López que remató Roger de cabeza picando el balón para la intervención de un muy atento Armando. Respondió al poco tiempo el Cádiz en un disparo desde la frontal del área a cargo de Fleurquin que atrapó Pinto. Los amarillos, más cómodos cuanto más adelantaban sus líneas para presionar arriba, apenas pasaron apuros en este primer tiempo que remataron con tablas en el marcador.

El líder, dormido
Comenzó la reanudación con un Celta en exceso relajado y un Cádiz con más ganas que lo intentó en el minuto 50 por medio de Sesma, cruzando en exceso el balón cuando estaba sólo ante Pinto. En el Celta todo el peligro venía por banda izquierda con un Gustavo López ganado en presencia y pegada e intentándolo con centros a sus compañeros pero también en jugadas personales siempre cerca de convertir pero fallidas al fin y al cabo.

Y entonces llegó el primer gol visitante. Fue en un saque de falta de Enrique en el minuto 61 que Oli remató de cabeza al larguero y que De Quintana culminó empujando a placer el balón al fondo de las mallas. Fernando Vázquez, que vio peligrar si quiera el empate, movió fichas, primero Giovanella por Capucho para cambiar de sistema y pasar a un 4-3-2-1 y ya después, a la desesperada, Perera por Berizzo, para reconvertirlo en un 3-2-3-1 que tampoco fue fructífero.

Penalti y expulsión
Cambios hizo también Víctor Esparrágo, pero en su caso para amarrar un resultado más que positivo que se vería incrementado en el tiempo de descuento gracias a un penalti que le valió la expulsión por roja directa a Pinto y que con Sergio bajo los palos transformó Manolo Pérez en el 0-2 definitivo. Con este triunfo los andaluces se acercan al segundo puesto del Eibar y se alejan un poquito más del Recreativo, cuarto clasificado.

Fuente: www.marca.com.