Se vio obligado a pedir el cambio ante el Cacereño por una molestia en la espalda y durante los últimos días está trabajando para poder participar con sus compañeros el domingo. Pablo Sánchez va a apurar hasta el último minuto y poder jugar ante el Arroyo. “Me encuentro mejor cada día. Tengo buenas sensaciones e intentaré estar el domingo para el míster. No sé en qué nivel llegaré pero eso lo valoraremos el sábado. El partido contra el Cartagena tenía molestias en el tobillo y decidimos que jugara. Mañana veremos si se corre el riesgo de empeorar o no. Es una molestia que puedo aguantar, quiero aportar cosas al equipo y me gustaría estar en el partido”.
 
El próximo rival ya ganó al Cádiz en la competición copera y es conocido por los jugadores. Esa eliminación es, además de los tres puntos en juego, un aliciente más para el capitán. “Es un partido clave que necesitamos ganar para estar de nuevo en la zona de arriba. Es un rival que ya nos ganó en Carranza y que nos dejó fuera de la Copa del Rey y tanto por la importancia de los tres puntos como por ganarles, tenemos ganas. No podemos permitirnos no sacar los tres puntos el domingo. El Arroyo viene de ganarle al Cartagena en su casa y de eliminarnos de la Copa. Es un equipo que hay que tener en cuenta, respetar, pero somos el Cádiz jugando en casa y tenemos que conseguir la victoria”.

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