El técnico cadista pasaba este viernes por rueda de prensa para analizar el que será el próximo partido en Carranza frente al Arroyo. El empate en Cáceres hace más importante aún una victoria ante su afición, pero enfrente tendrá a un equipo extremeño que ya sabe lo que es ganar en Carranza esta temporada. “Nos jugamos lo mismo que ante el Cartagena, meternos en la zona de arriba, más cerca. Es un partido complicado porque viene de ganarle al líder, ya nos ganó a nosotros y sobre todo es un partido importante porque si uno no gana fuera, tiene que hacerlo en casa. Con todo el respeto para el Arroyo, que es un equipo que aprieta muchísimo, que los extremos vienen a ayudar, con pivotes de mucha experiencia, delanteros que se mueven muy bien, etc., pero siempre digo que dependemos de nosotros, ser ese equipo alegre e intenso de Carranza de esos primeros partidos”.
 
El equipo no acaba de encontrar el camino de alargar en el tiempo buenos resultados. Eso para Alberto Monteagudo es culpa de todos, tanto de jugadores como de cuerpo técnico. Y entre todos deben encontrar la solución. “Todos somos culpables de la irregularidad. Yo soy el que planteo y ellos los que intentan hacerlo. Hay sitios no llega y al revés. Son circunstancias porque en Cáceres lo normal es irte cero a cero y no es lo mismo un punto que ninguno porque al final el líder pierde y en vez de estar a cinco de él estás a cuatro y es otra historia. Fuera de casa hay que intentar centrarse más, buscar las alternativas que sean para ganar. El siguiente fuera podemos ver nuestro nivel porque el Belmonte está mejor que Carranza a nivel césped. Va a ser una buena primera piedra de toque. Pero primero es el Arroyo que es un partido difícil”.
 
Ve normal que haya tanta igualdad en la parte de arriba y que ningún equipo se haya despegado aún lo suficiente en la tabla. Lo considera lógico en la primera vuelta y pone de ejemplo los últimos cuatro resultados del líder en los que tan solo ha cosechado dos puntos. “En las primeras vueltas todo el mundo es parecido. Aunque tengan equipos menos presupuestos te complican la vida con cuatro jugadores rápidos y bien plantados. Las rachas son muy malas. En Segunda B si no ganas, pasan partidos y no lo haces. Y al revés también, pues ganas y no sabes cuando vas a dejar de hacerlo. Eso le ha pasado al Cartagena y lleva cuatro semanas en las que ha sacado solo dos puntos. Esto es así. Está claro que el que tiene regularidad y gana tres partidos seguidos, pasa del 14 al 4. Hay que intentar eso”.

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