Al fútbol nadie lo va a cambiar y los resultados son los que mandan en esa montaña rusa en la que se convierte este deporte que mueve masas al ritmo de las alegrías y las tristezas. Lo cierto es que si la paciencia fuera un líquido que llenara un frasco, en el del Cádiz CF quedan ahora pocas gotas.
 
Tres derrotas consecutivas, cinco en doce jornadas, 15 puntos de 36 posibles, undécimos en la tabla, a seis de playoff y a tres de la promoción de descenso. Estos números son ahora mismo una realidad, tanto como el hecho de que Gaucci pasara de erigirse la pasada jornada en la única persona en hablar a los medios a estar en completo silencio las horas siguientes a perder en Albacete. Si se trata de sensaciones estas se dirigen hacia el único camino de la destitución del técnico, algo que por el momento no ha ocurrido. Aun así la rumorología se dispara y los nombres de entrenadores comienzan a aparecer por cualquier esquina. Los que podrían haber sido sondeados, los que son ofrecidos y los que ni siquiera saben de qué va la historia. Todo aquel que esté en paro y tenga cierto nombre aparece en una quiniela que, quien más y quien menos, espera que tenga un final feliz. Ya sea con Monteagudo o con cualquier otro. Es en lo único en lo que estamos todos de acuerdo.
 
Desde Lucas Alcaráz (UD Almería, Murcia, Recreativo, Córdoba CF, Xerez CD), de quien se habló el pasado verano que podría ser el elegido por Quique Pina en caso de continuar al frente del apartado deportivo del Cádiz CF, pasando por Óscar Cano (UD Melilla, UD Salamanca, Poli Ejido, Granada CF), el ex azulgrana Chapi Ferrer (Vitesse), David Vidal (Albacete, Elche, Lleida, Las Palmas, Real Murcia, Compostela, Hércules, Cádiz, Logroñés, Rayo, Villarreal, Hércules), Pedro Braojos (Cacereño, Granada, Linares, Real Murcia, Real Jaén, Sporting de Gijón, Leganés, Almería, Toledo) o Raúl Procopio (Polideportivo Ejido, Extremadura UD, Unión Estepona, Cádiz CF, Balompédica Linense).
 
Una lista que puede llegar a ser interminable pues, a pesar de las dificultades, a buen seguro que el Cádiz CF sigue siendo apetecible para cualquier entrenador. De eso no nos puede caber ninguna duda. Las decisiones de continuidad y cambio son de los responsables, al igual que la responsabilidad de acertar o no también es de ellos. Mañana podría ser un día clave, pues está prevista una reunión de los responsables del club. El equipo descansa este martes y habrá que esperar al miércoles para saber si el inquilino del banquillo cadista seguirá siendo el domingo Alberto Monteagudo o no.