Aún no le ha llegado el gol, pero Wilson Cuero se muestra tranquilo. Confía en su trabajo diario y que con ello comiencen a llegar los goles con el Cádiz. “Trabajo siempre para estar para el míster. Espero con paciencia las oportunidades. Me está faltando el gol pero trabajo para que este llegue y ayudar al equipo. Un delantero siempre piensa en el gol y si no marcas entran las dudas. Pero estoy tranquilo porque estoy haciendo un buen trabajo. Solo me falta esa poca de intensidad para rematar. Espero que si el domingo juego hacerlo lo mejor posible para marcar”.

La portería está siendo perforada más por jugadores que no son delanteros. Eso ayuda a que los arietes no se sobrepresionen si no están acertados. “Este año tenemos que repartir la responsabilidad de marcar goles y en ese sentido los compañeros están liberando de ella a los delanteros. Están haciendo un buen papel y no tenemos esa presión. Como delantero, uno tiene que esperar la oportunidad de que lleguen”.

Admite que no está siendo fácil acoplarse a lo que Claudio Barragán quiere de él, pero que lo va consiguiendo un poco más cada día. “Con Claudio tenemos otro sistema de juego, jugar más de cara. Pero poco a poco me voy encontrando mejor y empezando a entender el fútbol que quiere el míster. Con el Granada B el juego era de muchos centros y yo estar pendiente en el área. Espero encontrar los espacios para estar en zona de gol. Tengo que fijar a los centrales para aprovechar mi velocidad para tener espacios a su espalda. Y que mis compañeros tengan oportunidad de entrar en acción desde atrás”.

Ahora piensa en ganar en Lorca, pero para eso el equipo tendrá que afinar mucho y ser certero en las ocasiones de las que disponga. “Es una defensa muy dura. Tenemos que tener tranquilidad. Será un partido complicado y sabemos que saber leer el juego. Encontrar sus puntos débiles. Esperamos traernos los tres puntos”.