El Cádiz vuelve este fin de semana a la realidad de la Segunda División B con todo lo que pasó en Copa del Rey aún en las retinas. Y precisamente algo de ese capítulo debe servirle al equipo de Claudio Barragán este domingo para enfrentarse al Mérida.

Ante el Real Madrid se vio a un Cádiz suelto cuando tenía el balón en su poder. Sin ningún tipo de complejos por parte de sus hombres de ataque a la hora de encarar a jugadores como Pepe, Nacho o el propio Arbeloa. Eso lo pudo percibir la grada al igual que sabe que es lo que ha estado faltando en los últimos partidos ligueros.

Ante el Real Madrid el balón no quemaba y se quería. La frescura que el equipo demostró ante los blancos en el Ramón de Carranza debe trasladarse ahora a la liga, como así recordaba el pasado miércoles el propio Claudio Barragán.