Playoff sublime del Cádiz CF. Un gol encajado en seis partidos y seis a favor. Cinco victorias y un empate. Ninguna derrota. Y todo ello aderezado de una humildad sin límites, luchando hasta el último minuto. Con concentración, con entrega, con solidaridad. Con la idea que quería Claudio Barragán cuando llegó y la cual ha sabido plasmar a la perfección Álvaro Cervera en apenas mes y medio.

No en vano el técnico cadista se acordaba en rueda de prensa de su antecesor no sin falta de razón. “Quiero acordarme de Claudio, él puso los cimientos para que pudiéramos llegar hasta aquí”.

Sin duda alguna el Cádiz ha hecho el mejor playoff de todos los disputados hasta la fecha. Y este el camino a seguir a partir de ahora. La afición lo ha entendido y ha sido una parte más de esa manera de jugar. En Carranza se volvió a jalear cada balón cortado, cada carrera para defender, cada despeje de cabeza o incluso cada balón que la zaga mandaba a córner.

Un Cádiz de garra que ha logrado algo tan difícil como es salir de este maldito pozo de la Segunda División B.