El Cádiz CF ha dado un giro radical a su temporada desde la llegada de Gaizka Garitano. Con la victoria ante el Racing de Santander (2-3), el equipo ya encadena nueve partidos sin conocer la derrota, una racha que ha servido para recuperar la identidad perdida en los primeros meses de liga. Ahora, el equipo es reconocible, sólido y competitivo, características que parecían diluidas en el inicio del curso.
El cambio de dinámica comenzó el 14 de diciembre con una victoria ante el Albacete BP (1-0) en el Nuevo Mirandilla, el primer triunfo en la era Garitano. Desde entonces, los amarillos no han vuelto a perder. Siguió un empate ante el Burgos CF (1-1) y otro punto sumado en la visita al UD Almería (1-1). Ya en 2025, el Cádiz CF arrancó el año con un empate sin goles ante el Levante UD (0-0) y una victoria contundente en el campo del CD Eldense (1-4).
La racha tomó aún más fuerza con el triunfo en casa ante el CD Mirandés (3-1), otro empate valioso en La Romareda frente al Real Zaragoza (0-0) y la exhibición ofensiva en el Nuevo Mirandilla contra el FC Cartagena (5-2). La última victoria, en El Sardinero ante el Racing de Santander (2-3), confirmó el crecimiento del equipo y su capacidad para competir ante cualquier rival.
Más allá de los números, el Cádiz CF ha recuperado su esencia. Ahora es un equipo compacto en defensa, con ideas claras en ataque y jugadores en su mejor versión, como Chris Ramos, Ontiveros o Álex Fernández. La mentalidad ha cambiado y la confianza ha crecido, aunque en el vestuario insisten en ir "partido a partido".
Lo que está claro es que el Cádiz CF vuelve a parecerse a sí mismo. La crisis del inicio de temporada es ya un recuerdo lejano y el equipo se ha convertido en un rival temible en LaLiga Hypermotion.
