Para el uruguayo, básicamente, el rival fue mucho mejor: "El Tenerife ha jugado muy bien y nos ha superado. No creo que haya sido nuestro peor partido, simplemente se trata de que ellos han sido superiores. No hay nada que objetar, tuvieron más ocasiones que nosotros y se demostró lo que habíamos dicho durante la semana de que era un equipo que estaba en un buen momento. Nos desbordaron, no encontramos nuestro sitio, pero no se puede decir nada negativo sobre nuestra actitud porque lo dimos todo".
El preparador amarillo está seguro de que la derrota no va a hacer mella en la moral de sus hombres: "Esto no va a pasar factura porque sólo hemos perdido una batalla, quedan cuatro partidos y vamos a pelear a tope hasta el final. Nunca damos más importancia de lo normal a las victorias y tampoco lo hacemos con las derrotas. ¿Un palo para la afición? Es un palo para nosotros porque somos los primeros interesados en ganar, la gente seguirá con el equipo porque sabe que lo da todo y hacía mucho que no perdíamos. Son muchos los equipos que querrían estar donde está el Cádiz, la temporada está siendo muy buena y no vamos a bajar los brazos hasta el final".
No hace cuentas ni piensa en fechas de celebraciones, pero cuando se le comenta que la jornada puede ser negativa tras la victoria de ayer del Éibar y si hoy gana el Recreativo en Xerez, recuerda cómo está la clasificación: "La cosa no se pone más difícil ahora, siempre es complicado estar arriba en una competición tan competida como ésta. Sólo pensamos en nosotros y no dependemos de nadie para seguir arriba porque llevamos una ventaja que nos lo permite. Sabíamos que se podía dar esta situación, con todo muy apretado, pero vamos a trabajar igual porque creemos en lo que estamos haciendo. No hay dudas, sí confianza".
El técnico del conjunto amarillo no quiso entrar a valorar los fallos cometidos por su equipo en el apartado táctico. "No es cuestión de decir en qué nos hemos equivocado. Sólo hay que decir que el rival ha sido mejor y que hemos cometido unos errores en los que vamos a intentar no volver a caer". Lo más importante para el técnico del Cádiz es que el vestuario no sale debilitado tras el partido: "Después de perder siempre estás triste, es normal, pero sabemos que no pasa nada y seguro que desde el martes vamos a estar como siempre, con ganas de trabajar pensando en el próximo partido. Los jugadores han llegado al vestuario al final del partido muy cansados por el esfuerzo que han hecho y no se les puede decir nada más. Estamos con confianza, unidos y sin problemas".El entrenador del Tenerife, José Antonio Barrios, se mostraba muy satisfecho con el rendimiento de su equipo. "Estamos jugando con mucho orden y con mucha seguridad en los últimos partidos. El equipo no tiene la presión de la permanencia y ahora cada jugador tiene sus objetivos. Se está jugando bien al fútbol, con un orden, con equilibrio defensivo y cada día me gusta más el equipo. Al equipo nadie le prohíbe que toque la pelota y se hacen ocasiones de gol y hemos barrido del campo al Cádiz. Ha sido un partido completo, temporizando las jugadas, teniendo la pelota, circulando la pelota más lento o más rápido según nos convenía y tenemos que resaltar que el equipo está terminando bien. Cada uno tenemos un objetivo por el que jugar lo mejor posible y porque deseamos lo mejor para el Tenerife. Hemos sido justos vencedores y mucho mejor que el Cádiz. No hablo más allá del 30 de junio y ahora me preocupa el partido ante el Málaga. Antonio y Julio Hormiga le dieron vivacidad al juego, porque sabíamos que eso mataba al Cádiz. La calidad de Julio está a la vista y tenemos que quitarle la presión de decirle que tiene que salir a un partido para ganarlo".
Fuente: www.diariodecadiz.com.