Vencieron al Mallorca en la tanda de penaltis. El Atlético quedó tercero.

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Finalizó en el Ramón de Carranza el XVIII Campeonato Nacional Alevín de Fútbol 7 con el Espanyol como campeón. Los pequeños periquitos tuvieron que esperar hasta la tanda de lanzamientos de penaltis para alzarse con el título.

La final tuvo poco fútbol y sí mucha tensión. Las pocas oportunidades de las que gozaron ambos equipos fueron abortadas por los guardametas de uno y otro conjunto. La muerte súbita desde el punto de penalti decidió que los blanquiazules fueran los campeones.

Anteriormente el Atlético de Madrid se quedó con el tercer puesto al vencer a Osasuna tres a cero. Salomón Obama, que también recibió el trofeo al máximo goleador del torneo, se volvió a erigir en el mejor de su equipo marcando dos de los tres goles rojiblancos.

El trofeo al mejor jugador del campeonato se lo llevó el jugador del Espanyol Fode.

Reportaje fotográfico