Antes de las nueve de la mañana hicieron su llegada a la notaría tanto el hasta entonces máximo accionista del Cádiz CF, Antonio Muñoz Vera, como los que serían nuevos propietarios de la entidad: Gabriele de Bono (administrador de Sinergy HG Limited), como Vincenzo Silvestrini, el abogado Diego García y Jesús Ángel Pérez.
En la agenda estaba dejar plasmado y rubricado bajo contrato el traspaso del paquete accionarial mayoritario a los nuevos dueños, una vez que ayer se dedicaran a traducir los distintos documentos del contrato de compraventa. Un último trámite que finalmente no se hizo en la propia notaría, como cabía esperar, sino en las oficinas del club en el estadio Ramón de Carranza.
Fueron pasadas las diez de la mañana cuando Gabriele de Bono, Vincenzo Silvestrini y Jesús Ángel Pérez salían de la notaría camino del Ramón de Carranza. Dos horas más tarde lo hicieron Antonio Muñoz, Diego García y el notario Carlos Cabrera, ya que una avería en un ordenador retrasó la impresión de los documentos finales.
Puntuales, a las doce y media, comparecieron en rueda de prensa, tras haberse firmado todos los documentos, aceptando los nuevos compradores cantidades, cláusulas y detalles que sólo ellos conocen. Antonio Muñoz ya era historia en el Cádiz CF, una entidad centenaria que desde hoy tiene nuevos propietarios.