Otro de los temas que trató Gabrielle De Bono, la cabeza visible de Sinergy hoy en la rueda de prensa, fue el asunto de la titularidad de las acciones que en su día se cerró entre la mercantil con sede en Bristol y Antonio Muñoz Vera. El italiano explicaba que ya se le había transmitido a la administración concursal que están dispuestos a cumplir con los compromisos económicos a los que se habían comprometido en su día. “Pero sí es cierto que tanto en cuanto no se resuelva los litigios y la cuestiones legales sobre la titularidad de las acciones, Sinergy no está dispuesta a hacer más inversiones. Es decir, no se va a poner más dinero en el Cádiz si no se resuelve la cuestión de la titularidad real de las acciones del Cádiz”.

Ante la situación de la próxima subasta el próximo día 3 de diciembre, el abogado Enrique Zarza explicó que “hemos presentado una demanda de nulidad de dicho acto, con la petición de la paralización cautelar de dicha acción siempre y cuando no se resuelva si es legal o no. Estamos trabajando a nivel legal en distintas líneas para resolver el conflicto de las accione del Cádiz con Antonio Muñoz. Estamos convencidos de que los tribunales nos darán la razón, por lo que o no se llevará a cabo y si lo hace posteriormente resultará nula de pleno derecho”.

En ese sentido también informaban de que “hemos constatado esta mañana en una reunión con Antonio Muñoz, es que lo último que él querría en esta vida es volver a ser accionista del Cádiz. No contemplamos eso. Con los procedimientos judiciales que hay abiertos y partiendo de la base de que las acciones que salen a subasta puede que no sean legales, y de que no representan una mayoría simple de una junta general de accionistas, consideramos que solo un loco o un temerario podría participar en dicha subasta. Suponiendo que ni un loco ni un temerario fuese a la subasta, y que Muñoz no tiene ni la voluntad ni la capacidad económica para hacerse cargo del Cádiz, esperamos que el proceso se resuelva por la vía natural del acuerdo”.

Gabrielle De Bono lanzaba una pregunta en un momento dado de dicha rueda de prensa. “¿Ustedes comprarían un coche sin que le presenten el certificado de propiedad del coche?” Encontrándose con la respuesta de varios medios de que hace un año y medio sí aceptaron esa compra. A esto el italiano replicaba que “si a pesar de que has pagado la mitad, no le enseñan el título, ¿seguirían pagando?”

Por último lanzaba un órdago a Antonio Muñoz sobre el pago final de las acciones, el cual negaba que se hubiera pactado a plazos en el consabido pacto de Antequera. “Sinergy no ha pactado pagos aplazados. Esas son unas manifestaciones que hace Antonio Muñoz con un contrato en el que no consta la firma del administrador de Sinergy. No estamos preocupados, ni existe tensión. Solo le hemos manifestado a Muñoz que hay voluntad por parte de Sinergy de pagarle las acciones en el momento que demuestre que las acciones son suyas”. También explicaba que de esa posible ilegalidad “no nos dimos cuenta en el momento justo.

También se le cuestionaba a De Bono sobre esas dudas de la legalidad de las acciones a la venta surgidas en la primera Junta General de Accionistas tras su aterrizaje en el Cádiz, y que fue denunciada en la misma por Federico González y Paco Puig. No tienen constancia de que Diego García hubiera hecho algo al respecto. “Diego García es el abogado del Cádiz y no de Sinergy. Se está confrontando lo que dijo el abogado del Cádiz con lo que dice el abogado de Sinergy”. Enrique Zarza por su parte añadía que “no nos consta que Diego García participara en la legalización de esas acciones. Estamos analizando y solicitando información sobre los acuerdos que se hayan alcanzado, pero las palabras no me sirven. Solo los documentos físicos. Pregúntenle a Diego García”. De Bono finalizaba su reflexión a esa pregunta asegurando que “Diego García es un gran amigo y un gran abogado. Por lo tanto no creo que haya problema en que no dé esos documentos que le solicitamos”.

No faltó hacer referencia al libro de accionistas del club. De Bono quiso aclarar que “el libro de accionistas del Cádiz aún lo estamos buscando. Los administradores concursales ya manifestaron por escrito al juez que el libro no existía. Eso nos lo hicieron saber. Y que esa ausencia del libro de socios crea una indefensión a los accionistas reales del Cádiz. En la próxima rueda de prensa que daremos la próxima semana, daremos todos los detalles al respecto”.