El Cádiz CF es un club suculento, ahora que se han saneado las cuentas después de cuatro años estabilizado en Segunda División y con miras a Primera en la presente temporada. Circunstancias que no han impedido que haya ofrecimientos hacia Locos por el Balón para hacerse con el paquete mayoritario de acciones por parte de otros inversores, como el grupo estadounidense cuya venta no llegó a fructificar.
Precisamente uno de esos compradores que estuvieron interesados en el club cadista fue Turki Al-Sheikh, hombre de confianza del príncipe heredero de Arabia Saudí, que es actual propietario de la UD Almería.
Según ha reconocido Manuel Vizcaíno en Diario de Cádiz, el director general del club almeriense le admitió que "el club que quería el jeque era el Cádiz pero que no había podido contactar conmigo. Ese día, el director general firmó con el alcalde de Almería la cesión del estadio y le dijo al alcalde que el club que querían era el Cádiz".
Vizcaíno no elude hablar de venta del club, pero con matices. "Nunca he engañado a nadie. Este año voy a ganar más dinero y el año que viene pretendo ganar más, pero nunca vendería el club por dinero. Jamás rechazaré la oportunidad de que el Cádiz crezca de manera consolidada. Estoy abierto a que venga alguien a consolidar el proyecto como club con aspiraciones, no por el hecho de coger dinero y salir corriendo. Estoy abierto a que venga alguien que tenga mayor potencial económico. Respetando lo que hace el jeque del Almería, un modelo así no me gusta. Me gusta algo más parecido a lo del Mallorca, con potencial a largo plazo".
Añadió que "yo de vender no voy a avanzar nada. Cada uno juega sus bazas. Me gustaría tener la capacidad de ser el número uno en fake news, pero no es el caso. Lo que haya que hacer se hará sin que dependa de Pina o Vizcaíno. El club se no va a parar en un mundo cada vez más difícil competir: el Almería es de un jeque, el Girona de otro (Manchester City), el Zaragoza tiene detrás con empresarios fuertes… Todos tienen grupos empresariales consolidados y no podemos dejar de pensar en mirar a los ojos a los demás. No podemos pensar en subir y después en Primera pensar en rezar cada jornada, sino consolidarnos".