Una DAO es una Organización Autónoma Descentralizada, y se define así a una nueva organización haciendo uso de smart contracts y tecnología blockchain, controlada en su totalidad por algoritmo computacionales, brindando así presuntamente transparencia, inmutabilidad, autonomía y seguridad a las gestiones realizadas.

Y así nace MagicoDAO, con la misión de comprar el Cádiz CF a Locos por el Balón entendiendo que "la propiedad de un equipo no debe limitarse a un puñado de multimillonarios, sino a un movimiento de personas que quieren ser parte del mejor equipo del mundo, según explican en su web.

Las DAO cuentan con un sistema retributivo propio o de inversión, precisando de una inversión inicial por parte de los participantes. Es, por tanto, un medio especulativo de participación dentro de una organización regulado presumiblemente a través de acciones o participaciones de cara a un fin futuro.

MagicoDAO se define como "una comunidad de seguidores lo suficientemente locos como para creer que el fútbol debe ser propiedad de los aficionados" y para ello basan esta operación en cuatro puntos: la descentralización, la propiedad instantánea, las reglas y la hoja de ruta.

Con la descentralización se garantiza que los aficionados serán los que rijan la DAO, algo que comulga igualmente con la propiedad instantánea. Las reglas serán escritas en consenso y tras ello llegará la hoja de ruta que pasa por comprar el Cádiz "ganar LaLiga y ganar la Champions".

Detrás de este movimiento se encuentran como promotores Carlos Delgado, que fue director de operaciones de Footters, y Diego Arroyo, fundadión de Laagam, tal y como informa 2playbook.com.

Para llevar a cabo su proyecto han creado un canal de Discord que ya cuenta con 150 usuarios.

"Somos dos personas que no nos tiembla el pulso y lanzamos el vuelo" apuntan en una entrevista en el citado medio, e informan que la operación de compraventa se realizará por fases.

Habrá una fase en la que se estudiará la oferta que puede plantearse "y que debe permitirnos ver qué se puede comprar y qué no" y en el caso de conseguir la deseada recaudación de fondos se plantearía a quien comprar las acciones, ya que según apuntan falta por conocer la resolución final de la última ampliación de capital, las acciones adquiridas por la familia Contreras y por Ben Harburg. Hasta entonces Locos por el Balón SL contaba con el 49% del total del accionariado.

Consideran los promotores que "el lío accionarial del Cádiz, siempre en aguas bravas, permite pescar mejor" en relación a los minoritarios que podrían desear salir del club.

Lo que está claro es que antes de que se produzca un intento de compra debe haber un deseo de venta, que hasta la fecha no se ha producido, y por las últimas manifestaciones de Manuel Vizcaíno y el cambio en el accionariado y en el consejo de administración, parece que no se producirá.