La Peña Cadistas 1910 de Madrid, editora de la más importante base de datos histórica sobre el Cádiz CF en internet (www.cadistas1910.com) ha emitido un comunicado en relación al cambio de nombre del estadio Ramón de Carranza, que reproducimos a continuación:
COMUNICADO PEÑA CADISTAS 1910 SOBRE EL NOMBRE DEL ESTADIO
Rubio, Mané, Juan Jose, Juanito Mariana, Villalba, Carmelo, los hermanos Mejías, Barla, Jose González, Bolea y Lorente, Mágico, Szendrei y Tilico, Amarillo, Andrés González, Mosquera, Ibáñez, Escobar, Hugo Vaca, Cortijo, Carvallo, Raúl López, Ramón Blanco, Chico Linares, PACO BAENA.
Y así podríamos estar hasta la extenuación. Porque ellos fueron jugadores. Pero hubo entrenadores, presidentes, y sobre todo, aficionados. MUCHÍSIMOS. Generaciones enteras de gaditanos. Amigos de toda España que recuerdan nuestra época dorada en Primera, las salvaciones milagrosas, los regates imposibles de Mágico.
Todos, absolutamente todos, identifican nuestra casa como ESTADIO CARRANZA. Entendemos que el espíritu de la ley con la que se pretende cambiar el nombre a NUESTRO estadio es no enaltecer figuras que contribuyeron al franquismo: pocas veces se dice el nombre completo “oficial”; ninguna, se hace refiriendo o enalteciendo a una persona que nació en el siglo XIX, que como bien decía nuestro entrenador, “no conocía hasta esta polémica”.
Nosotros no entendemos de leyes. Ni de política, que nos gustaría que se quedara fuera siempre del palco y las gradas (hecho que por desgracia parte de nuestra afición no practica). Sólo entendemos de fútbol, del Cádiz CF y de su historia. Y sabemos que durante más de 70 años, nuestra casa se ha llamado Carranza. Apelamos de nuevo al sentido común, al espíritu de la ley, a que escuchen a lo toda la afición está pidiendo.
Porque hay más derivadas. Nuestro Trofeo siempre se ha llamado Carranza. El que otrora atrajera a los mejores equipos de España y del mundo, que muchos de ellos siguen exhibiendo orgullosos en sus vitrinas, esa Copa que erige orgullosa sobre todas las demás, aunque ahora esté devaluada. ¿Qué hacemos con él?
Estimados políticos del Ayuntamiento: si van a cambiarle el nombre al Trofeo, terminen de matarlo, porque nadie lo reconocerá ya. Y si mantienen el nombre del mismo, entonces estarán demostrando que este cambio de nombre va más allá de la ley y atiende a otros criterios partidistas o políticos.
Ningún jugador, y mira que los hemos tenido grandes (de fuera y criados aquí) aúna a toda la afición. Ningún aficionado (y también los hemos tenido muy destacados) nos representa a todos. Ya hemos visto la desafección que produce en otros estadios los cambios de nombre (¿quién llama “La Cerámica” al Madrigal? En Pamplona han tenido que volver a El Sadar). Ya hemos visto a muchos equipos mantener el nombre de sus estadios pese a haberse construido nuevos o totalmente renovados (Carlos Tartiere, Nueva Condomina, recuperación de Benito Villamarín, Nuevo Los Cármenes...).
No habrá nombre que todos reconozcamos, los de ahora y los de antes, los que se fueron y los que todavía estamos, que nos traiga a “cada rincón, cada escalón de mi Carranza”.
Por favor, manteniendo el respeto por la Ley, escuchen a la afición.