No es normal ni mucho menos que el entrenador del equipo filial sea presentado ante los medios de comunicación en la sala de prensa del Ramón de Carranza pero así ha sido en el caso de Fernando Niño, nuevo técnico del Cádiz B. El roteño tiene ante sí su primera temporada a cargo del segundo equipo del club cadista explicaba que “es un reto muy importante, muy bonito y el cual afronto con muchas ganas. Estoy deseando a comenzar lo antes posible. Agradezco al club, primero por permitirme pertenecer a él, y después por darme la oportunidad de entrenar al Cádiz B en una categoría tan bonita como es la Tercera División”.

La pretemporada comenzará a la par que la del primer equipo aunque todavía tienen que perfilarse muchos detalles de cuál será la plantilla que el Cádiz B tenga este año. Pero ha confirmado que habrá muchos jugadores que la pasada campaña militaron en el Juvenil de División de Honor, lo que lo convertirá en un plantel muy joven. Ese último aspecto no le preocupa de cara a un Grupo Z que será complicado. “El grupo será bastante fuerte, con equipos que querrán subir a toda costa a los que se le suman los que ya hay. Será un grupo bastante duro. El tener una plantilla joven para afrontarlo, hace que se vea con más ilusión que miedo. No será fácil pero estoy convencido de será una buena temporada”.

Piensa que la estabilidad que parece haberse instaurado en el club vendrá muy bien también en el trabajo de cantera y que éste se verá reflejado en el futuro. “Es importante la estabilidad. Se está trabajando bien y hay un proyecto ambicioso. Se piensa en pensar en la cantera y ésta tendrá un papel importante. La ilusión de todos los chavales es la de jugar en el primer equipo algún día y nuestra intención es esa. Es un reto complicado pero se va a hacer un equipo competitivo, joven. Que dé la cara y se va a hacer un buen papel. Mi objetivo es el de formarlos y prepararlos para que estén listos para el día que el entrenador del primer equipo tire de alguno. Es la ilusión de cualquier entrenador. Ojalá que haya jugadores que hayan debutado con el primer equipo. Es el granito de arena que tenemos que aportar los entrenadores de la cantera al club”.

Está convencido de que la relación con Antonio Calderón será cercana, aprobando también que el filial pueda tener un patrón de juego parecido al del primer equipo. “El primer equipo y el filial entrenarán a la misma hora e imagino que tendrá a jugadores del B en los entrenamientos. Si ambos juegan de la misma forma, es algo lógico para que cuando llame a alguno para el primer equipo esté preparado para jugar de una determinada forma. Eso sería terreno ganado”.