El entrenador del Cádiz CF, Gaizka Garitano, ha destacado la importancia del partido del próximo domingo ante el Real Zaragoza y la necesidad de sumar puntos para salir de la parte baja de la clasificación. Ha recordado que el equipo sigue en una situación comprometida y que, a estas alturas de la temporada, deben mantener la máxima intensidad en el trabajo para cambiar la dinámica.

Garitano ha insistido en que, aunque un encuentro se pueda empatar o perder, el objetivo prioritario debe ser ganar para evitar problemas mayores en la recta final de la competición. Ha recalcado que el Cádiz CF debe tener presente su situación en la tabla y la urgencia de obtener victorias.

Sobre la visita a La Romareda, ha señalado que se enfrentarán a un Real Zaragoza en buen momento y que será un partido complicado. Ha advertido que, si el equipo no se encuentra en su mejor nivel, el encuentro se puede volver aún más difícil. También ha resaltado que el equipo ha mejorado en ataque, logrando marcar con más frecuencia, pero ha llamado a mantener la humildad, ya que cualquier rival puede vencer con facilidad si no se compite con la intensidad adecuada. Además, ha subrayado la calidad de los jugadores del conjunto aragonés, lo que hace que el partido requiera el máximo esfuerzo por parte del Cádiz CF.

El entrenador del Cádiz CF, Gaizka Garitano, ha abordado la necesidad de refuerzos en la plantilla de cara al mercado de fichajes. Ha señalado que el equipo requiere incorporaciones que realmente aporten un nivel superior a los jugadores actuales y que puedan tener un papel activo en el equipo. En este sentido, ha confirmado que ya se han mantenido reuniones para tratar estos asuntos.

Garitano también ha indicado que pueden producirse tanto llegadas como salidas en el equipo durante este periodo de traspasos. Sin embargo, ha recalcado que su principal preocupación en este momento es el próximo enfrentamiento contra el Real Zaragoza.

Sobre la falta de fichajes hasta el momento, ha expresado su confianza en los jugadores que actualmente componen la plantilla, aunque ha reconocido que hay posiciones en las que se puede mejorar. Ha subrayado que algunos futbolistas necesitan más minutos de juego y que eso se podrá ver en las próximas jornadas. Asimismo, ha matizado que, si no llegan refuerzos, tampoco supondrá un problema, ya que el equipo cuenta con jugadores de nivel suficiente. En cualquier caso, ha insistido en que solo se fichará si la incorporación supone una mejora respecto a lo que ya hay en el equipo.

Avanza este miércoles 29 de enero, encontrándonos ya en la recta final de una segunda ventana de fichajes que finaliza a las doce de la noche del próximo lunes y en la que el Cádiz, presumiblemente, debe culminar más de un movimiento de mercado. El ataque del conjunto amarillo es el que, en palabras del propio entrenador, debe recibir más atención en lo que a refuerzos se refiere no descartándose alguna salida más de las que ya se han producido. Serán días en los que se tendrán que ir resolviendo situaciones de jugadores cuyo futuro es poco menos que incierto.

Por un lado estaría Luis Hernández, de quien Manuel Vizcaíno dijo en su día que tendría ficha en la segunda vuelta del campeonato. A día de hoy es complicado ver al central acumulando al menos una semana completa de entrenamientos con sus compañeros y se desconoce por el momento si realmente será a todos los efectos un jugador que estará disponible para el entrenador en lo que queda de competición. Avanzando en las líneas, con la salida de Tomás Alarcón y Rominigue Kouamé, la situación de Gonzalo Escalante podría haber cambiado con respecto a lo que parecía ser una salida más que probable. Ahora para esas dos posiciones Garitano tiene a cuatro efectivos porque junto al uruguayo están Alcaraz, Diakite y Fede San Emeterio. Salvo llegada en esa demarcación, debería descartarse cualquier variación en la misma.

Donde sí están todas las miradas puestas es en la vanguardia del conjunto amarillo. La salida de Iván Alejo, la cual no se produjo por decisión técnica, no ha sido aún contrarrestada con un refuerzo. Por el momento es Rubén Sobrino el que está asumiendo ese rol pero ha sido esa una posición en la que se necesita sumar a alguien y que también debería conllevar la salida de De la Rosa, al que el entrenador vasco sólo ha dado un cuarto de hora desde su aterrizaje al banquillo cadista. Tampoco hay que olvidar a Melendo, que llegó lesionado siendo la enfermería su hábitat natural desde este verano y al que se le ha venido poniendo durante todo el mercado de invierno la etiqueta de salida. 

Por último estaría la posibilidad de un fichaje para la delantera, donde Carlos Fernández y Chris Ramos están alejados ahora mismo del compromiso con el gol (tan solo uno del gaditano desde el punto de penalti desde la llegada de Garitano), donde Paco Mwepu claramente no entra en los planes del entrenador y donde Roger Martí sigue con una lesión sobre la que hay un mutismo oficial total y de la que nadie puede asegurar cuánto tardará en recuperarse.

En los casi treinta días de mercado el Cádiz ha estado trabajando para intentar dejar la plantilla que mejore con la que se inició la liga, se adecúe más a lo que el nuevo cuerpo técnico necesita, aunque por el momento tan solo Iker Recio y Mario Climent han sido las caras nuevas.

El técnico cadista recordaba semanas atrás la importancia que tendría lograr dos victorias consecutivas por primera vez esta campaña. Hoy el Cádiz tenía ante sí una nueva oportunidad y lo lograba al fin ante el Mirandés y ante su afición cuajando, además, un gran encuentro en el que le tocó sufrir a causa de la inferioridad numérica durante buena parte del mismo. Gaizka Garitano al término del choque resaltaba que "Ha sido un partido difícil contra un gran rival, un equipazo. Se nos ha puesto el partido bien, hemos salido muy fuertes y hemos hecho dos goles. Luego ellos han apretado, y encima se nos ha puesto más difícil con diez todo el segundo tiempo". Unos momentos complicados en los que el "hemos sabido sufrir y estar ordenados, pero el tercer gol nos ha dado la victoria". 

De la misma manera también quiso "felicitar a los futbolistas porque ante un rival buenísimo, el equipo ha sabido sufrir, estar ordenado y ganar un partido que se había puesto difícil porque hemos estado con diez jugadores mucho tiempo".

No cabe duda de que la mano del vasco está notándose en el Cádiz y son muchas las facetas en las que el equipo ha experimentado una más que notable mejoría. Entre ellas la del balón parado que hoy de nuevo sirvió para marcar.