Eugenia de Larcour

En una de las entrevistas que le hicieron al próximo presidente del Cádiz CF, éste, en alusión a las negociaciones para la venta del equipo, señalaba que había estado en numerosas compraventas de empresas, pero nunca en una como esta, más propia de “tratantes de ganado”, en alusión, claro esta, a Muñoz y su grupo. Me llamó mucho esta última frase y me ha estado rondando la cabeza a raíz de los últimos acontecimientos.

Los tratantes de ganado son aquellas personas que se dedican al tráfico de animales, o en plan metáfora, también aludiría a los que tratan a las personas como animales, sin escrúpulos, sin sentimientos y solo buscando el beneficio en su venta o eliminación.

Eso es lo que está pasando ahora. En principio dijeron que “todos contaban”, pero poco a poco van desapareciendo: Benito, Pepe Mata, Carlos Fernández, ... y también Oli. “Vamos a contar con todo lo gaditano” y me traen a un cantamañanas para anunciar un Trofeo que no ha visto en su vida, me contratan a una empresa de Madrid, a Curro Jiménez y al Bola para vender camisetas (como si hiciese falta)...

Me recuerda la famosa frase del “despotismo ilustrado francés”, pero adaptándola claro: “Todo para el cadismo, pero sin el cadismo”.

Es penoso e indignante la forma de proceder que han tenido con una persona como Oli, estandarte del Cádiz, mostrando no tener ningún respeto por la historia de un equipo, si no la han escrito ellos e incluso olvidando que hay personas que para sellar un contrato no necesitan más que la palabra dada y un apretón de manos.

En suma, eso me parece la nueva directiva, tratantes de ganado, que desde su prepotencia, su soberbia y su “aquí mando yo” (ya lo dijo en su presentación), van quitándose de en medio a todas aquellas personas (jugadores, directivos, a lo mejor, hasta taquilleros) que alguna vez saludaron a Muñoz o se muestren críticos con su labor. Poco a poco los van sustituyendo por una trouppe de amigotes y pelotas que desde sus particulares tribunas públicas se dedican a adularlos y a echar la culpa de todo lo malo a lo anterior.

Yo no voy a ser la que venda mi alma al diablo y apoye esta forma de proceder por hacerme creer que pertenezco a un club de elite y prometerme que el Cádiz jugará alguna vez la Champion. Muy bonito, pero no pago el precio. Así que por mi pueden seguir con su particular “caza de brujas” y pasar a los abonados. Arriba tienen mi nombre, puedo ser la primera,... En el fondo, hay un poco de miedo y cobardía, no creen...