Yoni Weiss/portalcadista.com

La visita a Mendizorroza nos trajo el primer punto a domicilio de la presente temporada. A algunos les parecerá positivo, mientras que otros considerarán corto el botín. De entrada cabe reseñar que Mariano García Remón nos sorprendió a todos con la entrada en el once inicial de Diego Rivas y Libero Parri. Esto nos hacía pensar en ese fútbol ofensivo que muchos reclamamos, debido a la calidad que se le presupone a la plantilla confeccionada para esta temporada. Pero resulta que los ingredientes de esta ensaladilla rusa aún no terminan de cogerle el punto de mayonesa que tan exquisito manjar requiere.

[Sigue...]



Curiosamente los hombres de más calidad no están terminando de coger la manija de este equipo. Menos mal que los peones de brega están respondiendo. No se le puede reprochar en este caso al entrenador cadista que no apostara por hombres de los que deben marcar las diferencias. Algunos han terminado por darle la razón al técnico cuando nos decía semanas atrás que aún están por acoplar. Y es que la llegada de tantos jugadores a última hora ha traído consecuencias. La primera de ellas es la descoordinación con sus nuevos compañeros. La segunda, la diferencia existente en el plano físico con los que iniciaron la pretemporada. Hay que añadir a todo esto la plaga de lesiones musculares que estamos sufriendo en el inicio de campaña.

El sábado, García Remón apostó por un once que manejara más y mejor el balón, pero se encontró con un Alavés muy agresivo y ambicioso que acumuló mayor número de efectivos en el centro del campo y se hizo dominador de los primeros minutos. Cierto es que el Koke Contreras apenas pasó por situaciones comprometidas, solo la que él mismo se generó en aquella jugada que terminó con libre indirecto dentro del área cadista. Sin duda, la línea defensiva rayó a gran altura y eso fue determinante para no pasar los apuros que pasamos ante el Salamanca. Solo el lunar del gol de Aganzo, en la que hay una falta de entendimiento entre Vella y Gonzalo Vicente, pero solo fue eso, un solo lunar dentro de un completo partido de una zaga “nueva”.

Diego Rivas demostró que él solo se basta y se sobra para destruir en el centro del campo y a medida que se vaya acoplando a su compañero de la medular volverá a recordarnos a aquel “Toro Blanco” que brillaba en el Getafe. La intermitencia de Lobos, Parri, Dani, Pavón y Enrique (aunque este último estuvo más participativo) hicieron que el encuentro fuera más físico que técnico, algo que sin duda nos perjudicó. Afortunadamente el gol del rival fue rápidamente contrarrestado por Parri en una jugada donde Dani se peleó él solo contra el mundo. Demasiado solo estuvo el trianero toda la tarde. Al menos, en esta ocasión no sufrimos, pero insisto, el Cádiz esta temporada ha sacado resultados sufridos ante rivales de poca entidad y ha mordido el polvo ante otro aspirante.

Esperemos que el cocinero García Remón vaya dándole el punto necesario a esta ensaladilla para que pronto alcance mayor prestigio que la que en su día tuvo la popular ensaladilla de Las Palomas.

Yoni Weiss/portalcadista.com.

Image
Trekant Media SL
ESB72147374
Cádiz
WhatsApp: (+34) 645 33 11 00
redaccion@portalcadista.com