Preocupante

  21.02.2010  

 

Que un equipo no sea capaz de aguantar en casa dos ventajas en el marcador, aunque sea contra el líder, es para preocuparse. El gol de Cristian a los dos minutos había puesto partido ante el Hércules como casi nadie habría soñado antes del mismo. Con el dos a uno en las tablillas (la mayoría de estadios de Segunda B tienen marcador electrónico funcionando) el equipo no supo ni defenderlo ni sentenciarlo. Así es complicado obtener resultados.

Quienes sí lo han hecho hoy son todos los equipos que están en la lucha por la permanencia. Murcia, Real Unión, Huesca, Girona y Celta han conseguido la ansiada victoria metiendo al submarino en una más que preocupante situación.

Foto. portalcadista.com

También lo es que en la demarcación en la que se deciden los partidos, la del delantero, haya tan poca pólvora. Toedtli se deja la piel pero su estado físico no es el óptimo, Tristán tampoco cuenta para Espárrago como hombre clave al igual que le pasara a Javier Gracia (¿casualidad?) y Bartholomew Ogbeche… ni está, ni se le espera. Y el mercado terminó, dicen, sin encontrar nada que mejorara lo que había. Ni ahí ni en otros puestos.

Y más preocupante, aún si cabe, es que hoy a Carranza no asistieran ni la mitad de sus abonados. Eso sí que es para hacerse muchas preguntas. No me valen las excusas del partido televisado o la del Carnaval. La temporada pasada en el primer domingo de carnaval 10.000 cadistas asistieron al estadio para ver a su equipo enfrentarse al Linares en Segunda B. Este domingo sólo estuvieron presentes 6.000. De esos que hoy no han pisado el coliseo amarillo, muchos han desertado ya. Alguien está fallando y no es precisamente el aficionado, que sus razones tendrá. Son otros los que tienen que hacer examen de conciencia. La Federación de Peñas podría haber puesto quizás más ímpetu en prever esta situación y menos en evitar pitidos a Abraham Paz porque tampoco lo evitaron. Lo políticamente correcto normalmente no te deja ver las realidades y esa no es otra que la afición del Cádiz se siente y se encuentra tan huérfana como aquel hijo al que sus padres ignoran.

La solución, desde el 1 de enero a las doce de la noche, sólo pasa por el banquillo. Víctor Espárrago tendrá que hacer encajes de bolillos para salvar la categoría. Los mismos que tendría que haber hecho Javier Gracia si no le hubieran culpado de los errores cometidos por otros.

Miguel Ángel Vallecillo

Image
Trekant Media SL
ESB72147374
Cádiz
WhatsApp: (+34) 645 33 11 00
redaccion@portalcadista.com