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Resignados
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22.03.2010 |
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Otra jornada decepcionante para la familia cadista. Tan decepcionante que ya hasta la grada ha tirado la toalla dando la callada por respuesta a la finalización del choque.
Mientras, en el verde del Carranza se repetía la historia de las últimas jornadas. Voluntad, empuje y ocasiones. Y es que los hombres de Espárrago han llegado a hilvanar buen juego y ocasiones muy claras de gol. De hecho, el tanto del Cádiz ha venido precedida de una muy buena internada y centro de López Silva, dejada de Toedtli y remate acertado de Abraham, que anota por segunda semana consecutiva. Tras el gol, y siguiendo con la secuencia cíclica, nuevas oportunidades de los jugadores cadistas para cerrar el partido, y como las semanas anteriores poca fortuna a la hora de matar el partido.
Pero llegó el descanso. Y los comentarios en los alrededores de las cantinas y aseos no eran otros si no cuestionar la actitud que tendría el equipo a la vuelta de vestuarios.
Pues los temores de los aficionados se hacían realidad y de nuevo el nerviosismo se apoderaba de los jugadores vestidos de amarillo. Imprecisiones en los pases, despistes en las marcas, pasito atrás y entrega de la posesión y el campo al rival, y claro, así no podía llegar otra cosa que no fuera el gol del empate del equipo visitante. Y gracias, porque el Rayo hoy no supo aprovechar el “knockout” que supone el encajar un gol a los amarillos.
En los últimos compases el partido se ha abierto y se ha podido dar cualquier resultado. Los rayistas han fallado un par de ocasiones claras, pero el Cádiz ha marrado también hasta tres ocasiones más claras aún y todo por precipitación y nerviosismo.
Termina el partido y la grada se muestra con una tibieza preocupante. Apenas algunos tímidos silbidos hacia los futbolistas cuando se retiraban, pero nada más. Bajada de brazos por parte de una afición que no cree que merezca este calvario por el que está pasando con más pena que gloria. Y eso sí que es preocupante, porque demuestra a las claras que buena parte de la afición ya piensa en bajarse del submarino antes de que toque fondo definitivamente. Que no merece la pena que un domingo sí y otro también se vayan cabizbajos a casa. Y máxime viendo como los rivales van haciendo sus deberes y abriendo hueco con los rezagados. Si la afición baja los brazos como hoy, poco nos queda.
Yo aún mantengo un halo de esperanza, pero que todo pasa por el Stadium Gal. Y es que mi teoría se basa en los partidos de casa, y en su defecto, de arañar fuera de casa los puntos que se te escapen del Carranza.
Ya no es problema de calidad, hoy el equipo ha trenzado jugadas muy interesantes. Tampoco creo que sea cuestión de suerte, eso es excusa para mediocres. Creo que todo se basa en un problema de mentalidad. Espárrago debe de machacar bien esa parcela porque la salvación pasa por ahí.
Hoy nuestra defensa ha hecho que los Movilla, Tena, Rubén Castro, Michel, Pachón, se vieran impotentes ni siquiera de acercarse a Kiko Casilla durante los primeros 45 minutos. Solo hay que trabajar psicológicamente para reforzar anímicamente a estos jugadores para que no se derrumben con tanta facilidad.
Hoy nuestra defensa ha hecho que los Movilla, Tena, Rubén Castro, Michel, Pachón, se vieran impotentes ni siquiera de acercarse a Kiko Casilla durante los primeros 45 minutos. Solo hay que trabajar psicológicamente para reforzar anímicamente a estos jugadores para que no se derrumben con tanta facilidad.
Yoni Weiss