
Los ánimos se calmaron una vez que tanto Ramón Blanco como Antonio Manzano se acercaron a éste aficionado, con el que siguieron dialogando un buen rato ya en tono más sosegado.
Este episodio pone de manifiesto la preocupación de algunos aficionados, que ven cómo el equipo a estas alturas aún no ha conseguido amarrar un objetivo tan lejano como era el inicial y que se trata de salvar la categoría.