Días atrás el Cádiz C.F., a través de su web oficial hacía pública una noticia en la que se especificaba que el número de entradas que el Real Unión de Irún ofrecería para la afición cadista serían "algo superior a 1200" que se venderían a un precio de 20 euros sin distinción de edad, abaratandose en cinco euros las mismas sobre el precio inicial proyectado (de 25 euros). Aunque desde Cádiz también se había hablado de que se enviarían hasta 1500 y 1600 entradas.

Desde el Real Unión de Irún se desmiente tal información y Ricardo García, su Presidente, expresaba ayer a una radio local su sorpresa ante el número de entradas que se espera desde Cádiz envíe su club "me estoy quedando asombrado con el tema de las entradas", exclamaba "Estamos obligados a dar unas setecientas u ochocientas, pero nunca lo que se dice por ahí. Al Cádiz no le hemos confirmado nada. Nosotros queremos que Gal sea txuribeltz por todos lados. Además, desde Cádiz tampoco nos han dicho cuántas entradas quieren", reconocía, en palabras recogidas por Diario Vasco.

El principal handicap en todo este asunto es el limitado aforo del Stadium Gal, unos 6500 incluyendo los de la grada supletoria que se instalará, así como el temor a que la afición cadista convierta el estadio irundarra en un pequeño Ramón de Carranza, ya que el Real Unión de Irún jugaría todas sus bazas aprovechando el factor campo en el partido de vuelta.