El Cádiz CF continúa con su escalada en la clasificación tras encadenar su cuarta victoria consecutiva. Lo hizo ante un Real Valladolid que se estaba mostrando hasta el momento como uno de los equipos más ofensivos. Sin embargo los de Álvaro Cervera supieron aprovechar su oportunidad con un gol de Álex Fernández a los primeros minutos y no cometer errores en defensa. Esfuerzo y eficacia fueron suficientes para llevarse los tres puntos.

La primera parte comenzaba con mucha intensidad y con el primer ataque del Cádiz en el primer minuto con un disparo de Salvi que tenía que rechazar junto a su palo izquierdo Masip. Las ideas estaban claras y los amarillos querían mandar pronto en el marcador. Tanto fue así que a los cinco minutos un córner a favor de los de Cervera acababa con un balón rechazado a la frontal del área que Álex Fernández cazaba para con su pierna derecha sacarse un disparo que tocaba en un defensor y engañaba a Masip para colarse el esférico en la portería. Por delante en el marcador el partido cambiaba y obligaba al Valladolid a exponer más.

El equipo pucelano precisamente no concentró su ataque por banda izquierda para aprovechar la presencia de Servando, que era la solución a las ausencias de Carpio y Correa, sino que lo hizo por la izquierda. Allí tanto Óscar Plano como Antoñito ponían en dificultades a Lucas Bijker. Sin embargo las llegadas de los de Sampedro no se traducían en importante peligro. Un par de disparos lejanos hicieron intervenir a Cifuentes para atajar el esférico.

El Cádiz tampoco podía aprovechar demasiado la ventaja del gol pues cuando robaba el balón, el rival rápidamente cortaba el juego a través de falta.

Tras el descanso el Valladolid seguía con su intención de buscar el empate y el Cádiz estaba obligado a mostrar su velocidad en las contras más de lo que lo había hecho en la primera parte. Una de esas acciones llegó con una galopada de Álvaro García que metió un balón al área desde la línea de fondo pero no llegaron al remate ni Carrillo ni Salvi. Pudo hacerlo Carrillo tras una galopada de treinta metros pero su disparo final con poco ángulo fue despejado por Masip a córner. De que llegara el empate también estuvo a punto de hacerlo el Valladolid con un centro Iban y Giannotas remataba al lateral de la red en el segundo palo.

Si el Cádiz no era capaz de marcar un gol más estaba claro que iba a tocar sufrir hasta el final. Cervera tuvo que realizar un cambio obligado al tener Mikel Villanueva molestias y daba entrada a Kecojevic. Posteriormente también lo hizo con Rubén Cruz sustituyendo  Carrillo. Con este último se buscaba incomodar la salida del balón al Valladolid presionando más arriba. Y eso funcionó pues de primeras el ímpetu visitante.

El ritmo de partido cambió y en los minutos finales el Valladoldi se quedó con diez futbolistas por expulsión de Luismi al derribar en la frontal del área a Rubén Cruz cuando éste encaraba portería.

La recta final del partido fue de sufrimiento pues aun teniendo la desventaja numérica no dejaron de colgar balones al área. Eso sí, sin crear peligro en ninguno de ellos. Tan solo en una falta lanzada por Hervías en la que Cifuentes tuvo que estirarse para despejar el balón, puso el miedo en la grada.

La victoria ya no se le escaparía al Cádiz, que alarga su racha venciendo a uno de los equipos más peligrosos en ataque de la categoría y haciéndolo además dejando su portería a cero.

FICHA TÉCNICA:

Cádiz CF: Cifuentes, Servando, Villanueva (Kecojevic, 58’), Marcos Mauro, Lucas Bijker, Garrido, José Mari, Salvi, Álvaro García (Barral, 75’), Álex y Carrillo (Rubén Cruz, 66’).

Real Valladolid: Masip, Moyano, Deivid, Kiko Oliva, Antoñito, Borja (Hervías, 73’), Luismi, Óscar Plano (Giannotas, 59’), Michel, Toni (Iban Salvador, 59’) y Mata.

GOLES:
1-0 Min 5. Álex Fernández.

Árbitro: Moreno Aragón (comité madrileño). Mostró amarilla a Borja (8’), Masip (83’) por el Real Valladolid y a Marcos Mauro (40’), Garrido (76’), Lucas Bijker (79’) por el Cádiz CF. Expulsó a Luismi del Real Valladolid por roja directa en el minuto 83.

Incidencias: 12.971 espectadores en el Ramón de Carranza.