- ¿Se miran las cosas de una forma diferente?

No, cuando ganamos varios partidos seguidos tampoco la mirábamos de otra
forma. Se pierde y se gana, ahora pensar en el Lleida y pensar en los tres
puntos.

- ¿Estáis incómodos los delanteros?

El tema es que cuando no llegan balones buenos arriba no podemos hacer
mucho los que estamos allí. Es cuando el equipo no está como siempre nos
repercute a todos. Con derrotas nada es igual, de todas formas hay que
estar tranquilo. En mi caso ni antes era tan bueno ni ahora soy tan malo.

- ¿Ha cambiado algo entre el antes y el ahora?

Muy bien, sin ningún problema. No he notado el cambio. Cuando se pierde el
entorno piensa que todo está mal, hemos jugado peores partidos que el
Éibar.

- A perros flacos todo se le vuelven pulgas...

Eso mismo. Cuando se pierde y más con tres derrotas seguidas todo se ve más
malo y pesimista, por eso nosotros tenemos que seguir en nuestra línea.

- ¿Qué no hay ahora que había antes?

Un poco de suerte. Si meten el cabezazo de Paz que hubiera sido el 2-1 les
hubiéramos metido cuatro como siempre en casa. Resulta que ahora no entró y
después cuesta.

- Pero las dinámicas negativas...

Cuesta trabajo romperlas, lo importante es que dentro del grupo sigamos
igual, que no nos moleste y no tengamos presión de la gente. Jugando con
tranquilidad tenemos un buen equipo.

- Quizás se han malinterpretado sus palabras de la pasada semana sobre la
presión.

Dije que cuando un equipo se siente que debe ganar quizás no es el mismo
equipo, es lo que yo pienso. No tiene que ver nada con ser miedosos o que
no busquemos el ascenso, nada de eso, cuesta más porque los equipos te
conocen más. No es lo mismo ir décimos que ir primeros, cuando estás arriba
los equipos buscan cuidarse más en que no lleguemos. Eso repercute en
presión de juego no en presión de gente.

- ¿Le dice algo el haber perdido más partidos en casa que fuera?

Prefiero que sea así, por lo que tenemos más posibilidades que antes. Es
todo lo contrario a lo del año pasado que lo ganabas todo en casa y fuera
era ir para perder tres puntos, ahora al menos existen las mismas opciones
jugando donde sea.

- ¿Sería pronto hablar de una final en Lleida?

No puede ser una final faltando veinte partidos. Nosotros tenemos que
conseguir tres partidos más para estar tranquilos y atar la permanencia.
Pensaría lo mismo si hubiéramos ganado.

- ¿Qué me dice de los cambios que dice que va a hacer el entrenador?

Es normal si se pierde hay cambios.

- No me puedo creer que no le preocupe.

Es que ahora se ve todo más diferente, si los cambios vienen bien para el
equipo que sea así. Da igual que sea yo o cualquiera, no pasa nada. Somos
26 futbolistas y los que están afuera están deseando entrar y cuando lo
hagan seguramente lo harán bien.

J.G.