Para el partido contra el FC Cartagena, el aspecto que presentará el terreno de juego del estadio Ramón de Carranza no será ni mucho menos el que se podría esperar de un recinto deportivo como el gaditano, donde el marrón de la tierra supera en estos momentos claramente al verde del césped.
Estos problemas comenzaron hace tres semanas, justo con un cambio en el sistema de riego que coincidió justo con las precipitaciones que cayeron en Cádiz y que inundaron la Plaza de Madrid, además de una invasión de malas hierbas del verano que comienzan a aletargarse en esta época.
A estos inconvenientes ahora se le suma otro más, las palomas, que han encontrado alimento idóneo en el Ramón de Carranza y han acabado con gran parte de las semillas que hubieran servido para la resiembra del césped.
La idea era que el terreno de juego estuviera en óptimas condiciones para este encuentro, pero no será así. Florentino Manzano mostraba su enfado en los micrófonos de la
Cadena COPE “esto es lo que pasa cuando no se arregla un campo en verano, que es cuando se debería haber arreglado. Están resembrándolo y sus cuidadores prestándole la máxima atención, pero el tiempo no está acompañando. Nos dicen que en un plazo de quince o veinte días el campo tendrá ya un buen aspecto”.
Mientras tanto, las gradas del Ramón de Carranza mostrará una imagen envidiable, pero su terreno de juego provocará el sonrojo de propios y extraños.