El CD Virgili Cádiz consiguió un empate 2-2 en su visita al Social Energy Alcalá FS durante la jornada 10 del Grupo 5 de la Segunda División B. En un enfrentamiento marcado por la intensidad y el esfuerzo, los gaditanos mantuvieron ventaja hasta la segunda mitad, pero un gol en propia puerta terminó neutralizando sus aspiraciones de victoria, consiguiendo un punto que supo a poco en la expedición amarilla.
El encuentro arrancó con oportunidades claras para ambos equipos. En el primer minuto, Carlitos dispuso de una ocasión para el CD Virgili Cádiz, pero su disparo se fue desviado. Poco después, el portero Joni se convirtió en una pieza clave al evitar goles de Chicho y Manuel Fernández del equipo local.
El CD Virgili Cádiz se adelantó en el marcador en el minuto 12 gracias a Pancho, quien anotó tras cruzar el balón desde la banda derecha, superando al guardameta Lautaro. Este gol dio confianza a los visitantes, quienes rozaron el segundo tanto tras una destacada intervención de Joni en el minuto 13.
El empate llegó al inicio de la segunda parte cuando Buendía transformó un penalti cometido por Joni. Pese a este revés, Jesulito devolvió la ventaja al CD Virgili Cádiz en el minuto 27 con un disparo raso desde fuera del área que sorprendió a Lautaro. Sin embargo, en el minuto 33, un intento de despeje de Poti terminó en gol en propia puerta, dejando el marcador igualado nuevamente.
El panorama se complicó aún más para el CD Virgili Cádiz tras la expulsión de Poti en el minuto 36, lo que dejó al equipo con un jugador menos durante dos minutos cruciales. A pesar de la inferioridad numérica, los gaditanos mostraron un sólido desempeño defensivo, manteniendo el empate y bloqueando los intentos del Social Energy Alcalá FS.
En los últimos momentos, el equipo local buscó la victoria utilizando a Caricol como portero-jugador, pero el CD Virgili Cádiz resistió con firmeza, asegurando un punto que deja sensaciones encontradas. Aunque el resultado pudo haber sido más favorable, el equipo demostró que está preparado para competir en una de las ligas más exigentes.