Con todo el dolor de mi corazón, tengo que decirte, míster, que mi último voto de confianza lo tienes este domingo ante La Roda en nuestro flamante Carranza, en idéntico sentido que supongo que te lo concede Gaucci.

Siempre te he apoyado y defendido desde el principio, frente a quienes te han criticado y casi no han tenido paciencia desde tu llegada.

En Cáceres, tras el partido, hablaste sin esconderte con mi hermano y conmigo, tras comentarte que veníamos él de Miranda de Ebro y yo de Villanueva de la Serena, y nos demostraste que contigo se podía hablar y discutir de fútbol sin problema alguno, aceptando la crítica con madurez y serenidad.

De cualquier manera, las recientes tres derrotas consecutivas y, más allá de ellas, la imagen y la falta de testiculina ofrecidas en tales partidos, han provocado que comience a pensar seriamente que quizás me he equivocado y es posible que no estés aún preparado para llevar las riendas de un club histórico como el Cádiz, con tantas necesidades y urgencias.
Que conste que me entristece decir esto porque valoro en demasía tu proposición de juego, al menos en casa la mayor parte de las ocasiones, y tus ganas de contar con chavales de la cantera, algo que hacía tiempo que no se atrevía a realizar nadie, ni siquiera un técnico gaditano que "mamó" de la misma (José González).

Pero eso no es todo, Alberto, hace falta una personalidad fuerte de verdad para imprimir un carácter más agresivo a los jugadores, que nos encontramos en la maldita 2ª B por desgracia y, "sin echarle lo que hay que echarle", no se consigue nada, incluso atesorando calidad (¡ya ves para qué nos sirvió la temporada pasada!).

Te cuento una anécdota. Yo vi el partido con el Arroyo gracias a sus peñas, que me facilitaron el viaje de vuelta en uno de sus autobuses, de lo contrario no tenía manera de llegar a Villanueva para poder acudir a tiempo al curro, e imagínate... Lo cierto es que se portaron conmigo de lujo, pese al vergonzoso espectáculo sufrido, y apenas "me cargaron". Pues bien, en un área de servicios se hizo una parada porque poco después llegaban los jugadores y se les quería dedicar "un paseíllo" para celebrar la contundente victoria. Después de "tragar" con ello, en un momento que fue posible me acerqué a Abel Buades, viejo conocido del Cádiz y amigo tuyo, y le pregunté qué le había dicho a Fall para provocarlo, a lo cual me contestó que simplemente le había recriminado que protestara al árbitro solicitando falta, pues no era, y a renglón seguido el cadista se dirigió a él con las malas intenciones que ya contemplamos. Le pedí su opinión del equipo en general y me afirmó que los jugadores del Cádiz, en un buen número, literalmente, “son `niñatos´ que creen que por llevar el escudo del Cádiz van a ganar los partidos y en 2ª B hace falta gente con `cojones´”. Le pregunté además sobre ti y me comentó que apreciaba tus ideales de juego y tu valentía para otorgar la oportunidad a los chicos de las secciones inferiores, aunque consideraba que no terminabas de adaptarte al plantel que posees, en el cual faltan mimbres para desarrollar tu prototipo de sistema, añadiendo que “con la plantilla 2011/2012, se hubiera salido de la tabla con seguridad y habría ascendido a 2ª practicando un fútbol alegre y vistoso”.

No concedí excesiva credibilidad a cada una de las sentencias que pronunció. En cambio, a continuación del repetido fiasco en Albacete, resulta difícil no atribuir una buena dosis de fiabilidad a sus tesis.

Pese a lo expuesto, mostró en la conversación una actitud amistosa y correcta, asegurando que al final de liga estaríamos arriba, lo que ahora no veo tan claro si la situación actual no da un giro de 180º.

Monteagudo, medita sobre lo acontecido hasta el momento en las dos competiciones (Copa y Liga), reflexiona acerca de las decisiones adoptadas por ti y ten en cuenta que no hay margen para el error. Hay que reaccionar como sea de una vez e ir a ganar cualquier encuentro, actuando de local y también de visitante. Demostremos más intensidad, más "sangre", más compromiso, más entrega, más lucha sin tregua, ¡más `cojones´! Sólo así podemos avanzar y salvarás tu cabeza y la de tus jugadores. De lo contrario, vuestras horas están contadas y nos llevaréis a un fracaso estrepitoso.

La misma fortaleza que has demostrado, por ejemplo, para "sentar" a Aulestia, debes potenciarla para que la nave cadista no se hunda por completo.

¡TENÉIS QUE SUDAR LA CAMISETA! NO EXISTE OTRA OPCIÓN NI SISTEMA.

Te deseo lo mejor, con el corazón en la mano. No nos falléis de nuevo, Alberto.

---

Envíanos tu artículo de opinión, con tus datos personales, DNI y teléfono de contacto a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.