¿Pitos? No, gracias
El sabor de la victoria regresó al Ramón de Carranza una vez que en el paladar desapareció el del polvorón, aunque todavía algunas consecuencias de la ingesta masiva de hojaldrinas haya podido quedar en alguno. La segunda vuelta comenzó igual que la primera, con una victoria ante el Roquetas, ni fue bonita ni fue clara, algo parecido a lo que pasó precisamente cuando comenzó la competición liguera, pero ha servido para aprovechar el tropezón inesperado del Poli Ejido ante la Balona.
Durante el partido ante el Guadalajara hace dos semanas, y cuando terminó el mismo, vi lógicos los pitos que el equipo se llevó. Nadie sabe por qué, pero en ese partido nada salió bien. Ante el Roquetas todos nos las esperábamos mejores, y algo mejoró el equipo aunque muy poquito. Se demostró casta, pero no volvió el bueno juego. Pero sí me mostré sorprendido cuando apenas se llevaban diez minutos de partido y la gente ya estaba pitando. Dicen que la grada es soberana y así es. Cada cual que paga su entrada es dueño de pitar o aplaudir, pero no puedo entenderlos ni los entenderé. Mucho se ha dicho que los pitos tienen que llegar cuando acaben el partido, y la mayoría de aficionados creo que piensan eso.
Quizás tengamos algún mal endémico que nos esté afectando, pero... ¿No nos hemos enterado que estamos en Segunda B?. Parece que la memoria es frágil, pero precisamente estos partidos que estamos viviendo últimamente son los típicos de la categoría. Los que nos encontramos durante los nueve años del calvario, y los que me temo que nos quedan por encontrar hasta el final de liga. Esto es lo normal, lo anormal era que el equipo se paseara cada partido logrando goleadas.
Esa apreciación no quita que se reconozca que existe un bajón en el juego. Quizá sea el vértigo de verse primero a siete puntos del segundo, pero es posible que la relajación apareciera hace algunas jornadas, y ahora se esté pagando el esfuerzo de reengancharse, porque ni mucho menos está todo el trabajo hecho.
Hasta el mes de mayo queda mucho, muchísimo. Puede pasar cualquier cosa. La afición del Cádiz siempre ha demostrado estar a las duras y a las maduras, en Primera y en Segunda B, por eso ahora debemos empujar más que nunca para que se logre la primera plaza y el regreso a Segunda A. ¡Ése Cádiz oé!.
José Grima
(Jefe de Deportes de Onda Cero Cádiz)
http://josegrima.blogspot.com