Diego Tristán: un fichaje, opiniones contrapuestas
La llegada de Diego Tristán al Cádiz ha creado varias corrientes de opinión enfrentadas. No sería lógico negar que la carrera futbolística del sevillano entró en un claro declive durante sus últimos años en España, como él mismo reconoció en su presentación como nuevo futbolista del equipo amarillo. Pero, por otra parte, tampoco sería justo esconder que el sevillano parece haber vuelto a iniciar el camino ascendente estas dos últimas temporadas, en las que ha vivido experiencias en el Livorno italiano y el West Ham inglés.
Muchas cosas se oyen y leen estos días. Que si Tristán es un
fiestero, que si le gusta mucho el
cachondeíto, que si viene aquí para sacarse el carné de socio del Barabass... pamplinas, a estas alturas, pamplinas. ¿Por qué juzgar sin ver?, ¿por qué no otogarle una mínima dosis de confianza a un futbolista que lo ha intentado todo y más para vestirse de amarillo? Tras tantos años en la élite, a Tristán no le falta el dinero. A Cádiz no ha venido a engordar su cuenta, entre otras cosas, porque no será ni el que más cobre de la plantilla. Por ello, y por la ilusión que mostraron sus palabras en la presentación, quiero creer que realmente viene a partirse la cara por el equipo del Ramón de Carranza. Para mangantes ya tuvimos
Benjamines y
Nanos en un pasado no muy lejano.
Resulta paradójico que algunos aficionados esgriman estas razones para criticar el fichaje del nuevo delantero cuando el mayor ídolo amarillo, el Dios todopoderoso del cadismo, el fútbol hecho hombre en Cádiz, fue uno de los mayores golfos de la historia del fútbol.
En otro orden de cosas, no es lo mismo decirle a un defensa de Segunda División que se encargue de marcar a un delantero sin nombre que encomendarle la misión de parar a Toedtli o Tristán. Los nombres, queramos o no, imponen. Y el que tuvo, retuvo. Un Diego Tristán bajo de forma, cojo, manco, tuerto y con la gripe del pollo es mejor que muchos delanteros de Segunda. La pena es que en el esquema actual de Javi Gracia no tenga cabida la
Doble T, aunque tengo la esperanza de ver juntos a los dos goleadores compartiendo minutos en alguna ocasión. Juntos podrían formar una pareja terrorífica para las defensas rivales... si es que a sus compañeros les da por centrar bien alguna vez. De momento, nos conformaremos con verlos por separado. ¿Quién ganará la batalla de la titularidad?
Álvaro Geneiro
http://futbolsalagaditano.blogspot.com/