La Crónica Daltónica (desde otro color): Granada 3 - Cádiz 3
Como le dijo la madre de Boabdil a su llorón reyezuelo cuando entregó las llaves de Granada a los Reyes Católicos: “¡Te podías haber quedado con el llavero de recuerdo, carajote!”.
¡Qué bonita es Granada! Enclavada entre el Mul-hacen -que, como todo el mundo sabe, significa en árabe “huevos congelados”- y el Veleta –que, como todo el mundo sabe, significa en gaditano tránsfuga-, destaca principalmente la calle Pedro Antonio Alarcón. Bueno, si eres de los gafapastas y te interesa la cultura también tiene la Alhambra, el Generalife, la Catedral, en fin una preciosidad. Recomendamos encarecidamente su visita. Eso sí, llevarse una rebequita.
Granada, tierra soñada por él. Gran partido a balón parado en la capital del reino nazarí. Gracias a las cámaras de Onda Cádiz pudimos comprobar la asistencia de unos 3.125 cadistas. En los prolegómenos vimos por la tele a gente importantísima que están haciendo mucho y bien por el cadismo como, por ejemplo, la Tata Pepa.
El partido tuvo dos partes: la primera y la segunda. Entre medio, un merecido descanso. El Cádiz saltó al terreno de juego de riguroso amarillo pollo. El Granada con su vestimenta habitual de los últimos años.
Ya desde el inicio se ve que la táctica del fuera de juego está muy verde y hay que ensayarlo más. A los tres minutos Fleurquin, que a pesar de los premios es cadista pero que no anduvo muy fino, controla fatal tirando a yampezamo una pelota en el centro del campo, dejando solo a Oscar Martínez que marca en mano a mano contra Casilla. Uno a cero.
El Granada sorprende en varios ataques al Cádiz que sigue haciendo malabarismos en el alambre en la tierra de la Alhambra (buena cerveza) con el fuera de juego.
Hasta que se produce una falta a la altura del centro del campo granadista. Jugada ensayada: saca Caballero y peina hacia su portería el defensa Suárez. Gol del Granada. Empate a uno. Esta jugada tiene mucho mérito porque la tienen que ensayar cada uno con su equipo a más de 335 kilómetros de distancia. Aún así, está más sincronizada que el fuera de juego en la defensa del Cádiz.
El tanto lo cantaron así desde Onda Cádiz: ¡Gol! ¡Gol de Teófila! (Antonio Díaz); ¡gooool!¡Lo dije, gol de Kiko, que lo saqué yo con la camiseta rosa sin lavá cuando era un chaval y que gracias a mí …. (Ramón Blanco); Gol del Granada en propia puerta. Y punto y coma. (Nacho Limón).
Los apostantes que arriesgaron todos sus ahorros en el patrocinador del Cádiz a que en el minuto 37 Fleurquin vería su primera tarjeta amarilla acertaron de pleno, llevándose un pastizal que para estas fiestas de despilfarro que se avecinan –a pesar de la grave situación económica mundial- no les vendrán nada mal.
Fin de la primera parte. A la ducha. Decir que Rosu estuvo muy activo durante todo el viaje a la capital granadina pues no se podía creer que fuera a ser titular. Dicha hiperactividad le produjo una lógica relajación durante el partido, impidiéndole tocar la pelota en más de una ocasión. Concretamente la tocó una vez.
Nada más empezar la segunda parte jugada de Enriquinho, gran recorte en el área, centro al segundo palo, Toedli hace una dejada que más bien era una abandonada, pero Raúl López llega con todo y marca un golazo con la derecha de categoría internacional yugoslava. Uno a dos. Increíble.
Pero solo cuatro minutos después, corner a favor del Granada, saca Antonio Ocaña, el Cádiz que marca en zona…azul, el Pájaro que tiene una pájara y no se cosca y Lucena remata. Casi-casillas demuestra que es un portero con hambre y se la come con papas. Dos a dos.
Y yo me pregunto, ¿cómo es posible que el domingo pasado le ganáramos al Lucena y hoy nos marque el Lucena? Los caminos del Señor, que son insondables.
No obstante lo cual, el líder no se achara y va a por la victoria. En el minuto quince marca el dieciséis. Caballero saca una falta por la derecha y Fleurquin de cabeza remata a la red en otro gran gol a pelota parada y jugada ensayada. Dos a tres. Como el bueno de Andrés marca pocos no sabe muy bien cómo celebrarlo.
Pero a los veintidós minutos de la segunda parte Fleurquin realiza un bonito penalti sin maldad que prácticamente no vio nadie, a parte del árbitro que estaba a dos metros, de todos sus compañeros, de los del equipo contrario, de los asistentes al partido y de todos los que lo estaban siguiendo por la televisión. Y nueva expulsión. En nueve partidos que lleva jugados ya van dos. Otra contribución de Andrés para el Libro de los Excesos de los Amigos de Guiness, en su apartado “Y no aprenden”. El penalti lo tira Ocaña y Casi-casillas casi-lopara. Gol. Tres a tres.
Con uno más el conjunto local desplegó todo su potencial en busca de la victoria, demostrando que es un equipo que tiene que estar más arriba de la clasificación y nos metió el miedo en el cuerpo. A punto estuvo de conseguirlo en una clara ocasión pero anduvo atento el cancerbero cadista para despejar.
Pero el que de verdad la tuvo fue el Cádiz en el descuento. Fran Cortés pone una asistencia al rey de las asistencias pero el asistente se encuentra como ausente y no se si quiere darle de tacón o hacer una filigrana, el caso es que Enriquinho falla solo ante el portero.
Final. Empate con sufrimiento. Ya pasó el susto. Ufff, a respirar tranquilos. Seguimos invictos lejos de Carranza. A por el Antequera.
Enhorabuena al Granada, que hizo un gran partido. Destacó el gaditano Ocaña, que tampoco valía para el Cádiz, y Lafuente, que volvió loco a toda la defensa y tuvo tiempo además para cubrir la zona mixta para la cadena Ser. Totalmente confirmado.
Lo importante es que no se perdió, pero suponemos que a Gracia no le hará nada de apellido que su equipo encaje tres goles. Esos detallitos sin importancia habrá que corregirlos para evitar que pasemos tantos sufrimientos y nos llevemos más sustos. Habrá que entrenar mucho y coger el truco para darle al balón un mejor trato. Truco, trato, truco-trato. ¡Joé con las influencias! ¡Y eso que yo siempre he sido de los del día de difuntos, con to los muertos de Halloween!
Abrazos cadistas.