El desafío
La afición ha hablado. Y su forma de protestar ha sido contundente, dejando tal vacío en Carranza que solo se recordaba en los peores años de la anterior etapa de 2ªB.
Si ya de por sí la medida del medio día del Club resultó del todo impopular e inoportuna, por las fechas en las que nos encontramos, las declaraciones del presidente terminaron por avivar el fuego y provocar que los que estuvieran indecisos, decidieran unirse a las voces que clamaban por el boicot.
El resultado, no puede ser más paupérrimo. Mañana nos desayunaremos con cifras dispares en los distintos medios de comunicación, yo he preguntado a varios medios congregados en Carranza y no parece haber unanimidad. Entre los 3.000 de unos y los 5.000 de los más optimistas. Yo me quedo con una cifra entorno a los 3.500 aficionados que se han dado cita esta tarde en Carranza. Y ojo, no todos de pago, lo que supone una afrenta más al socio que si ha pasado por taquilla. Y es que un aficionado me llamaba al móvil después de que yo hiciera una valoración en la previa de Punto Radio. Este aficionado me alertaba de la medida que había tomado el Club y que no era otra que regalar entradas en algunas escuelas, sin que estas entradas fueran específicamente para los escolares y sí para sus progenitores. Así me comentaba como por ejemplo, se habían repartido hasta 60 entradas en la escuela de fútbol de Michael Robinson, destinadas a los padres de sus alumnos. Este aficionado había recibido una localidad a través de su hijo, sin que en esta localidad se hiciera mención a la categoría a la que pertenecía esta entrada, es decir, era una entrada de acceso general. Como quiera que dicho abonado no podía o no quería afrontar el pago de la cuota de mediodía del Club, recibió la entrada como un regalo de Papa Noel (que no de ningún Rey Mago), y pudo asistir a un partido que ya daba por tachado en su calendario, pero decidió denunciar este hecho a este medio por el agravante que suponía ante los abonados cadistas.
¿Qué pretendía el Club con este regalo de Navidad para unos cuantos? Pues no cabe duda que “maquillar” los números de asistentes al encuentro para intentar arrimar el número a los 8.000 ó 9.000 que desde el Club tenían previstos.
¿Se nos echará en cara ahora que el Club no podrá pagar por culpa de los aficionados que se han negado a pasar por caja? ¿Se nos amenazará de nuevo con la llegada de otro falso Mesías, llámese Baldasano, Verdejo, Quique Pina o San Peo bendito? ¿Nos dirá que no se pueden traer refuerzos porque no nos lo merecemos?
La respuesta a todas estas preguntas se lo voy a facilitar yo mismo Sr. Presidente. La empresa es suya, solo y exclusivamente suya. Cuando vuelva a vender, solo para usted y los suyos quedará el reparto del botín, por lo tanto, si hay que poner dinero en la empresa para lograr ascenderla y hacerla más atractiva, ya está usted tardando en aflojar la cartera. Ya está bien de chantajes emocionales a una afición a la que no le puede tirar ni un reproche a la cara. Esta afición, que se quedó a la espera de la cacareada rueda de prensa tras el descenso. Esta afición que demuestra que por este equipo es capaz de hacer cualquier esfuerzo, pero que ya está más que harta de que encima de que nos traten como a putas, también pretenda que le paguemos la cama. Y es que hoy, esta afición ha dicho… ¡BASTA YA…!
Yoni Weiss