El Cádiz sigue hundiéndose en la tabla. Una derrota más para el equipo amarillo, esta semana en Lucena, lo coloca en puestos de descenso directo y en una situación mucho más que complicada. Con Ramón Blanco en el banquillo el submarino tampoco sale a superficie. Tres derrotas en tres partidos, cero goles a favor y cinco goles en contra es el bagaje del técnico gallego. Algo que, sin duda, lo coloca en el disparadero al igual que ocurriera cuatro jornadas atrás a Alberto Monteagudo.
Ramón Blanco colocaba sobre el césped un once con algunas novedades. Aulestia volvía a defender la portería, mientras que Garrido y Albentosa formaban la pareja de centrales para que Bermúdez ocupara el lateral zurdo sustituyendo al lesionado Tomás. Para la medular el técnico cadista daba entrada a Domingo junto a Fall, una opción que ya fue probada en el amistoso llevado a cabo esta semana. En los primeros compases el Lucena falló la primera ocasión clara. Una subida por la banda del lateral zurdo Albiol que sorprendía a la defensa del Cádiz, con la fortuna de que su pase atrás no fue aprovechado por Fede que, sin oposición y dentro del área, la mandó por encima del larguero. El Cádiz lo intentó a balón parado, pero una buena falta lanzada por Pablo al área fue a encontrarse a las manos de Limones cuando Belencoso entraba al remate.
Los de Falete lo tenían claro. Su juego de balones en profundidad a la espalda de la defensa y las internadas por banda, eran sus propuestas para el partido. El Cádiz intentaba elaborar más desde la salida, lo que provocaba más de una pérdida de balón entre los hombres de atrás que ocasionaban jugadas de peligro por parte del rival. Además, el conjunto amarillo no cerraba los laterales del campo con ayudas de sus extremos, lo que provocaba que una y otra vez los celestes se encontraran con superioridad en esas zonas del campo.El primer tiempo acababa sin ocasiones demasiado claras para ambos equipos. Juego muy embarullado era la tónica general de esa primera fase. Eso sí, el Cádiz acababa este período con los dos centrales amonestados. Albentosa y Garrido recibieron amarillas en sendas faltas.
La segunda mitad se esperaba al menos a un Cádiz más incisivo, que mostrara alguna superioridad en algunas facetas y en algunos sectores del terreno de juego. Pero los minutos pasaban y eso no ocurría. Con balón, el equipo se encontraba estático y sin ideas. Sin él, tampoco hacía méritos para cortar jugadas e iniciar alguna contra peligrosa. El Lucena avisó con un disparo de Fede que detuvo bien abajo Aulestia.
El partido parecía abrirse un poco más en los últimos 20 minutos. El Cádiz debía encontrar algunos espacios, se colgó algún que otro balón en el área que no encontraron rematadores y Villar mandó fuera un disparo en el área tras ser favorecido por un rechace. En las demás, siempre se apostaba por la versión más complicada de las acciones: buscar el regate cuando cabía el disparo, o intentar entrar en el área con una serie de pases que al final acababan con el balón en poder de un equipo contrario que se limitaba a meter balones en el corazón del área o disparos lejanos que detenía Aulestia sin demasiados problemas. En los últimos minutos Indiano tuvo una buena oportunidad de falta pero la lanzó por encima del larguero. Y en la siguiente jugada Domingo veía una segunda amarilla y se tenía que ir a la caseta. Quedaban siete minutos del reglamentario. Y pudo ser peor la situación en el aspecto numérico porque el colegiado perdonó posteriormente la segunda amarilla a Albentosa.
El rival olió el miedo cadista sobre el césped. Y cuando ya se pensaba más en no perder que en ganar, con el tiempo reglamentario concluido, llegó el primer gol lucentino. Fede aprovechaba un balón en el área de Pineda, que revolucionó por completo a los suyos con su entrada en el terreno de juego, para marcar en boca de gol. Sin tiempo ni siquiera para asimilar el tanto, y solo después de que Ramón Blanco sí agotara el tercer cambio dando entrada al único delantero que tenía de reserva Adri Gallardo, aparecía de nuevo Pineda pero parar marcar también dentro del área. Antes de ello la afición lucentina cantó “A tercera” y “esto sí que es una chirigota” al cuadro cadista.
El Lucena había llevado más balones al área que el Cádiz y en algo tan simple como eso ganó el encuentro. Buscó las maneras mientras que el Cádiz, que sigue ahogándose en sus propios miedos y falta de calidad, veía cómo se le escapaba un partido más.
Lucena CF: Limones, Cruz, Curro Vacas, Obregón, Albiol, Sarmiento, Juanjo (Martínez, 64’), Alfaro (Adri, 79’), Jesús Lanza, Fede y Fernando (Pineda 60’)
Cádiz CF: Aulestia, Moke, Garrido, Albentosa, Bermúdez (Gallardo, 91’), Domingo, Fall, Villar (Niko Varela, 73’), Dieguito (Indiano, 62’), Pablo y Belencoso.
GOLES:
1-0 Fede. Min 90
2-0 Pineda. Min 92
Árbitro: Arroyo Cortés (andaluz). Mostró amarilla a Albentosa, Garrido por parte del Cádiz CF y a Sarmiento y Cruz por el Lucena. Expulsó a Domingo por doble amarilla en el 83.